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Al igual que en Inglaterra y en España, el nuevo gobierno socialista de Francois Hollande en Francia, considera que las palabras padre y madre están tan cargadas de contenido “retrógado” y “homófobo” que simplemente hay que suprimirlas en los documentos, por otras.
Así un niño no tendrá un padre y una madre, que connotan detrás un hombre y una mujer, sino “progenitores” en términos genéricos, lo cual abre las puertas a la introducción de cualquier figura en ese genérico amplio de “progenitores”, que puede incluir a mas de dos personas e incluso a ninguna persona específica y conocida, si como van las cosas seguimos hacia la concepción artificial.
Esta ley que se aplicará para los documentos oficiales franceses, pero seguramente se ejercerá presión para que el criterio sea adoptado en todas las circunstancias, será presentada por presidente Francois Hollande, como proyecto de ley a su gabinete, el 31 de octubre.
El objetivo de esta reingeniería es legitimar el matrimonio entre personas del mismo sexo, gaymonio, y dar la igualdad de derechos de adopción para parejas homosexuales y heterosexuales.
La ministra de Justicia Christiane Taubira dijo al diario francés La Croix: “¿Quién puede decir que una pareja heterosexual va a educar mejor a un niño que una pareja homosexual, que van a garantizar las mejores condiciones para el desarrollo del niño?”. “Lo que es cierto es que el interés superior del niño es una preocupación importante para el gobierno”.
Pero lo cierto también es que hay investigaciones y gran cantidad de testimonios, que muestran que los niños criados por parejas del mismo sexo tienen más problemas en casi todos los aspectos de la vida que los criados por parejas heterosexuales, y que hay sobre estas investigaciones y testimonios una agresiva política de denuncia por parte del lobby gay y de prescindencia por parte de los políticos, obstinados en cambiar los valores de toda una civilización porque una ínfima minoría así lo quiere.
En el Reino Unido se procedió a sustituir los términos padre y madre del pasaporte por ‘progenitor 1’ y ‘progenitor 2’. Y en España, a raíz del gobierno zapaterista, se sustituyó madre y padre por ‘progenitor A’ y ‘progenitor B’ en el registro.
Estos tres intentos de violar la naturaleza por meros recursos administrativos (eliminar el sexo de los padres, casamiento de personas del mismo sexo y adopción de niños por parejas del mismo sexo), son el primer escalón de la pendiente descendente que transita la reingeniería social, que en lo inmediato, marcha hacia la maternidad subrogada o vientres de alquiler, porque las parejas homosexuales masculinas así lo requieren.
Y ya están planteados en el horizonte dos nuevos pasos. Uno es elcrecimiento del feto en un ambiente artificial, la octogénesis, que trae detrás el argumento lésbico de que la maternidad es un problema para la mujer, y lo asimilan a una enfermedad.
Y el otro es la hibridación, que es la mezcla del ADN humano con ADN de otras especies o simplemente su modificación, para eventualmente corregir defectos, evitar enfermedades y dotar a la raza humana de nuevas potencialidades.
Ambas cosas ya está en experimentación, y la hibridación es lo que está más avanzado, porque a micro escala ya se ofrece el servicio de modificación de algún gen defectuoso a los padres del niño, y a gran escala, se ha descubierto que los productos transgénicos que consumimos –que ya son una hibridación en sí mismos– están generando cambio de nuestro ADN humano.
Fuentes: The Telegraph. Signos de estos Tiempos
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