"¡Mis amados y queridos hijos! Hoy, os invito nuevamente a proseguir en el camino de la conversión, de la penitencia y de la santidad que Yo hace veinte años osseñalé y os mostré Aquí.
Seguid por el camino del bien, obedeciendo todos Mis Mensajes, procurando siempre más hacer de vuestra vida un continuo 'Sí' al Señor, colaborando al máximocon Su Gracia. Para que verdaderamente pueda realizarse la santificación y la salvación de vuestras almas y la salvación de las almas del mundo entero.
Caminad en la vía del bien, procurando siempre más estar conformes a Mi Corazón Inmaculado, teniendo los mismos sentimientos que Yo tengo, teniendo losmismos deseos y pensamientos que Yo tengo, procurando hacer aquello que Yo hago, y trabajar Conmigo para que Mis Mensajes lleguen al conocimiento de todos Mis hijos y así todos ellos puedan salvarse.
Caminad en la vía del bien, apartándoos siempre más del mundo, de las cosas vanas y pasajeras de esta Tierra, de las fáciles seducciones del mal, de las fáciles oportuniades de pecar. Para que verdaderamente, manteniéndoos resguardados del mal, recogidos y protegidos por la oración, por la meditación, por la huida de lasocasiones de pecado, vuestras almas puedan siempre más: crecer en las virtudes, crecer en la práctica del bien, de la observancia de todos los Mandamientos Dios ydel fiel cumplimiento de todos los Mensajes que Yo os he dado. Así, seréis verdaderamente Mis hijos, hijos del Señor, Mis verdaderos apóstoles de los últimos tiempos, que llevan al mundo entero Mi Gracia y hacen brillar sobre el mundo entero Mi Luz.
¡El Castigo está muy próximo, Mis hijos! El Castigo está a las puertas como nunca estuvo. El Ángel Segador va a pasar por muchas naciones y ¡ay, de aquéllas quese hicieron sordas a Mi Voz, a Mis Mensajes, a Mis Apariciones! El Aviso será casi tan terrible como el Castigo, Mis hijos, dará muerte a muchos que no quisieron escuchar a Mis llamadas, porque muchos ya ultrapasaron el límite soportable y tolerable, hasta para el Cielo, lo mismo que para la Misericordia Divina. ¡Cuántostraicionaron Mi Corazón! ¡Cuántos traicionaron Mi Amor! Cuántos trabajaron eficazmente para la destrucción de Mis Apariciones, para impedir que Mis Mensajesllegasen a las almas de Mis hijos, para impedir que Mi trabajo, que Mi esfuerzo, que Mi sacrificio lograsen éxito. Cuántos... cuántos infelizmente hicieron eso yultrapasaron todo límite soportable que la Misericordia Divina puede tolerar. Por eso, Mis hijos, es que el Castigo será tan terrible y es por eso también que el Avisoserá tan terrible como el Castigo y dará muerte a muchos, a muchos por igual.
¡Si no queréis estar en el número de estos infelices, oíd Mi Apelo, oíd Mi Voz, dadme vuestros corazones sin reservas, dame vuestro 'Sí', para que Yo puedatransformaros y moldearos según Mi Voluntad, la Voluntad del Señor, hasta que toméis aquel formato que Dios desea que tengáis, el formato de los grandes Santos, de las almas abrasadas de amor en pura transformación por Él, por Mí y también por la salvación de vuestros pobrecitos hermanos pecadores! ¡De esta forma, Mishijos, venid a Mí! En cuanto todavía estoy Aquí llamándoos, porque en breve, muy en breve, Mi Voz se silenciará y, entonces, retumbarán los Castigos, los truenosde la Justicia de Dios.
A todos en este momento bendigo y digo: Continuad haciendo todas las oraciones que Yo os he dado. Usad Mi Medalla de la Paz y de las Lágrimas que Yo os revelé aquí, en esta tierra Brasilera. Usadlas, porque ellas son un don de Dios para Brasil, para defenderos de los grandes males y de los grandes demonios están sueltos aquí, procurando la perdición de las almas. Usad Mi Medalla de Montichiari de la Rosa Mística, usad Mi Medalla Milagrosa y todos los Escapularios que osdi.
Continuad haciendo la Cruzada del Rosario todos los Domingos; ese Rosario extra, que rezáis para Mí los Domingos, es sumamente importante y con él he hechograndes cosas en el silencio y escondimiento de los ojos de los humanos soberbios y mundanos que existen en esta Tierra. Un día conoceréis estas maravillas, estasmaravillas, y bendeciréis los Rosarios de Mi Cruzada que vosotros rezasteis.
A todos, en este momento, bendigo generosamente, de SAN DAMIANO, de MEDJUGORJE y JACAREÍ. ¡La Paz, Mis hijos! Id en la Paz del Señor."
AVISO DE MARCOS TADEU: Nuestra Señora nos pidió en la Apareción de hoy que leyéramos en el Libro, 'Mística Ciudad de Dios', el Capítulo 18 (Tomo Segundo- Azul).
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