LAS RESPUESTAS A ÉSTOS ÚLTIMOS TIEMPOS. LÉELO:Y COMPARTE.

1.- Jesús nos dice como tenemos que buscarle.

2.- Jesús nos dice que tenemos que plantar cara a los anticristianos profanadores del templo y cómo.

3.- Jesús nos avisa que hagamos guardias en los templos para que no retiren los sagrarios.

08-08-2015  

Jesús: (1) Buscarme requiere un esfuerzo de todos los días. Yo no me manifiesto abiertamente a tu lado. Para encontrarme tienes que haber renunciado a las cosas.  Tienes que hacer una renuncia para encontrarme, hacer silencio. Requiere de un esfuerzo. Y luego Yo me manifiesto. Cuando me llamáis, vengo. Pero antes tenéis que sentir la necesidad de Mí y el anhelo de Mí. No vengo si no me llamas. No irrumpo. No aparezco obligando a amarme. Me hago desear. Me hago esperar. Llamo e invito a que vengas hacia Mí. Y luego es cuando entro, cuando me habéis dado paso a vuestra alma.

Puedo también aparecérteme como a San Pablo (Saulo): de repente y sin esperarlo.536 Pero eso es sólo un momento en vuestra vida. La realidad cotidiana, la de todos los días, es que tenéis que esperarme, y tenéis que buscarme. 

Amada: gracias por estos días de sacrificio escuchando mi Obra. Gracias, porque sé que te agotan. Es un duro trabajo, aunque parezca que no, y parezca que viene solo y para ti es un nadar en un mar de consuelos. Nada más lejos, nada más alejado. Es duro. Hace falta tenacidad. ¡No se lo podemos dar a cualquiera!, porque cualquiera no sigue con esto. Cualquiera se creería líder y especial. Y nadaría en engreimiento. Tú no eres cualquiera. Y a la vez, ¡eres tan pequeña!, ¡y tan débil! ¡Ah!, ¡por eso me gustas! ¡Por eso te elijo! y por eso continúo. ¿Continuamos, hija? ¿Estás agotada? 

(Las lágrimas me vienen por la dureza de esto. Es un agotamiento, una dureza psicológica. No sé qué me pasa. Ni cómo lograré hacerlo. Es demasiado duro. Estoy… me tiene como en el suplicio del corazón. Como si mi corazón estuviera al rojo vivo. Y el estar metida en la profundidad y dureza de los Mensajes, me agota).  ¡Continuamos, Jesús! ¡Gracias, Amada! Yo te sostendré. No temas. 

Hablabais hoy537 de cómo “sostener”538 el ataque de los anticristianos al Templo. (2) Te decían que no les podéis enfrentar cara. Pero Yo te digo que sí debéis hacerlo. Si existieran gentes valientes que les plantasen cara, no vendría la Abominación de la Desolación. La Abominación de la Desolación vendrá porque los cristianos han desertado de sus puestos, y han permitido las Profanaciones. Para evitar las Profanaciones no tenéis que consentirlas. Esto es un absurdo. No es dejando entrar en los Templos a profanar como defendéis la Eucaristía. Lo que tenéis que hacer es poneros entre el profanador y el Altar de Dios. 

(Entiendo que ésta es la postura que tenemos que adoptar: Si vienen a hacerse las fotos con el torso desnudo y pintadas y gritando, y se ponen en el Altar, nosotros nos tenemos que poner delante de ellas y el Altar. Y gritar: “¡Viva -  Jesús Sacramentado! ¡Viva -  y de todos sea amado!”). Juana, Juanita, lideras la Batalla de la Defensa de la Eucaristía. A ti te iremos dando instrucciones. Pero te diré que es una Batalla aparentemente perdida… ¡para luego resucitar! En un principio se te seguirá mucho. Serás muy seguida y la Iglesia se hará eco y te apoyará. Luego serás vendida a tu enemigo, que es la Falsa Iglesia, y en el nombre de la Iglesia, se te condenará.

 (3) Avisa dónde van a ser las Profanaciones, para dirigirte ahí con tu Ejército a evitarlas. Con la valentía de los fieles, la Iglesia al principio estará a favor de esa Defensa. No lo será luego. Cuando todo esté muy convulso. Diles que no retiren los Sagrarios. Haced guardia en los Templos. Pero irremediablemente esto tendrá lugar al final. Están esperando que el Papa dé un traspiés para borrarse de esta Iglesia y seguir la suya. Ellos mismos Abolirán el Sacrificio Perpetuo.

536 Cfr. Hch 9,1ss; 22,3ss.  

537 En una reunión. 

538 No es correcto “soportar”, “aguantar” la Profanación.   

1.- Jesús nos dice cuál es la principal labor que tenemos que hacer en nuestra vida.

2.- Cómo debemos afrontar la batalla.

3.- Jesús nos dice qué y quién es un Adorador.