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miércoles, 28 de febrero de 2018

DICTADOS DE JESÚS A MARGA, PARA ÉSTOS ÚLTIMOS TIEMPOS. LEÉLO Y COMPARTE.


25-04-2001 

Virgen: 
(A propósito del apostolado) 
¡Ay hija! ¡Muchísima caridad, por favor! Hija, tratáis con almas, ¡muchísima caridad para ellas! Mucho cuidado283 con los caídos, mucho respeto por los pecadores. Condenad al pecado, no al pecador. 
Eso sólo le corresponde a Dios. Hija, sí, “entra en las almas como de puntillas”, ahora que te concedo acercarte a su cancel, entra, pero haciendo reverencia. Es terreno sagrado, es el sitio de Dios, es la morada de Dios, de la Santísima Trinidad. 

 283 De cuidarles 

26-04-2001 

Jesús: 
Has de ir hija, has de ir ante ellos y decirles que la Nueva Evangelización no precisa de frases rebuscadas y presupuestos filosóficos nuevos. Lo novedoso de la Nueva Evangelización radica en el Amor, en el Amor de Cristo radicalizado en su Corazón, Corazón de Hombre y Corazón de Dios, Corazón de Dios–hecho– Hombre. Enamorarse de Cristo, conocer y aumentar ese Amor, es lo que dará al hombre la capacidad de amar a Dios y de amar a sus semejantes. 
Es la Fuente del amor esponsal, familiar, sacerdotal, de hermandad, de amistad, es la Fuente de donde brotan todos los demás amores. Pero si el hombre pretende amarse a sí mismo y amar a los demás sin amar a Dios, he aquí que nunca, nunca encontrará su plenitud, nunca su feliz destino, no podrá acercarse al Padre al final de su vida y decirle: 
Padre, hice todo lo que me mandaste. Porque ¡por qué abomináis de la Ley de Dios!, hijos descarriados, ¡el primer mandamiento que ya hace siglos que olvidasteis es este: “Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser”!284 Por qué predicar y decir que “la Ley de Dios mata”. La Ley no mata, hijos, la Ley da Vida, da la Vida. El Primer Mandamiento de la Ley de Dios dado a vuestros padres por medio de Moisés es: “Amarás a Dios sobre todas las cosas”. ¿Por qué decir que mata al hombre cumplir y amar la Ley? Cierro los ojos y me estremezco al pensar en la suerte que correréis al ser expulsados de mis entrañas de Padre. Quien confunde y descarría a mis ovejas no tiene parte Conmigo y será arrojado a la gehenna. Esta es la Ley, estos los profetas, ¡escuchad a los profetas!

Oscurecido y envilecido el mundo, tergiversador de la Verdad, son enviados a vosotros los profetas para aclarar lo que está oculto. Para desescombrar la Obra, hace falta deciros claramente las cosas porque ya no veis. Oscuro mundo de Satanás, viles mentiras, hermosas disputas por un puesto a mi lado, abandono cobarde de vuestra grey, oscurantismo y falsedad, ¡no–verdad!, noverdad en vuestros juicios, no–cierto, blasfemo, horrendo, hediondo a mis Ojos. 
No podéis recibir mi Amor ni mi Espíritu porque me habéis expulsado de vosotros mismos con vuestras obras de muerte. No digáis entonces que vuestros cuerpos son Templos del Espíritu285 porque estáis habitados por Satanás y es el espíritu del mal quien os gobierna y rige vuestras vidas. 

¡Volved!, volved a la Verdad. En la Tradición de la Iglesia, mi Casa, se encuentran los presupuestos filosóficos básicos y claros, certeros, sin confusiones y complicaciones. Desempolvadlos de vuestras librerías y predicad eso, no confundáis más a mi grey, que ya está muy confundida. No busquéis en amarga búsqueda nuevas verdades, nuevos presupuestos básicos. Ya están dados. Con esos, aclarad el paso vacilante de mi pueblo en su peregrinar en esta época oscura y recibid el Espíritu para solucionar las cuestiones actuales que no son más que desastre producido por no amar el Bien, por no Amar a vuestro Dios y su Dios. ¿Queréis recibir el Espíritu? Venid a Mí, venid verdaderamente a Mí, y de mi Corazón sacad Aguas con gozo286 para vuestra salvación. Amén. 

284 Cfr. Dt 6,5. 
285 Cfr. I Co 6,19; 3,16. 
286 Cfr. Is 12,3.

COMULGA DE RODILLAS Y EN LA BOCA. ES LO QUE QUIERE NUESTRO SEÑOR. COMPARTELO.

01-05-2017 
Mensaje urgente para España. 
Especial para los Sacerdotes.
También que, dado que “a la Eucaristía cada vez se le da menos importancia”,[3] y ya estáis en el proceso de la Abominación, hagáis fuerza para detenerlo, allá donde podáis. Para ello: quiero la Comunión en la boca y de rodillas. Quiero esto.
Díselo a vuestros obispos. Has de decirlo.
Esto es para frenar la Abominación de la Desolación en vuestros Templos.
Quiero menos folklore y más oración devota y recogida.
No quiero que vengáis a mis Templos a festejar cómo me estáis profanando.
Quiero que vengáis a reparar vuestra profanación primero, y luego la de otros.

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10-12-2011

Jesús: Necesito almas consoladoras del Sagrario, de la Eucaristía, ¡¡pero también almas que lleven la Eucaristía a los demás!! Almas eucarísticas.
Pensad que aquí, a la Custodia, no va a venir nadie, si no le habláis de ella. Yo aquí rescato. Pero no vienen a Mí. No vienen a pedir a ser rescatados.
Es éste mi mayor anhelo y lo que Yo os pido y Yo necesito: almas que me lleven a los demás, almas que le hablen de la Eucaristía, almas eucarísticas.
Amada, amados, cuántas catequesis, cuántas reuniones y cuántas programaciones en vuestras Parroquias, ¡y que poca vida eucarística!
Así, continuáis con vuestra misma vida de placeres, de comodidades e incluso de pecados. Y no estáis dispuestos a dar la vida por nadie. Mucho menos por vuestro Maestro.
Dejad todas esas organizaciones y venid, aunque sólo sea un rato pequeño al día, a estar postrados delante del Sagrario. Veríais cómo vuestros horizontes cambiarían, y veríais resurgir la Vida Nueva en vuestras Parroquias. Ni tan siquiera moviéndoos de allí. Ni tan siquiera haber empezado a poner en práctica ese plan maravilloso largamente trabajado.
Esos planes son como papel que va a la basura, no sirven de nada sin vida eucarística.
Veríais vuestras Parroquias renovar. Veríais vuestras Asociaciones, vuestros Grupos, Movimientos, florecer. Porque Yo les enviaría almas. Les enviaría vocaciones si fuérais almas eucarísticas. Veríais a vuestro Dios saciar la sed de vosotros. Daríais de beber a vuestro Dios.
Mi corazón, se encontraría consolado, y mis ansias de amor serían satisfechas.
A aquellas Comunidades donde se viva esto, Yo les prometo florecer.


Nueva Evangelización
«La Eucaristía es la manera más corta y más rápida para llegar al cielo»

10 consejos para enamorarte de la Eucaristía y conocer las gracias de las que hablaban los santos


    
Los santos comparten entre sí, entre otras cosas, un amor intenso a la Eucaristía, donde Cristo se hace presente. Y muchos de ellos han dejado escritos bellísimos sobre la comunión y la gran importancia que tenía para sus vidas.

“La Sagrada Eucaristía es la manera más corta y más rápida para llegar al cielo”,afirmaba San Pío X. O San Maximiliano Kolbe, que aseguraba que “si los Ángeles pudieran envidiar al hombre, lo harían por una sola razón: la Sagrada Eucaristía”. También Santa Teresa de Calcuta decía que “cuando observas el Crucifijo, puedes entender lo mucho que te amó Jesús en ese momento. Cuando miras la Sagrada Hostia, entiendes cuanto te ama Jesús en este momento".

Las gracias de la Eucaristía son enormes y numerosas. ¿Realmente las sabemos valorar? ¿Las aprovechamos? ¿Somos conscientes de ellas?

En un reportaje en Catholic Exchange, adaptado al español por Píldoras de Fe, el sacerdote Ed Broom, da diez claves para ayudar a obtener estas joyas presentes en la Eucaristía, llenas de gracias y bendiciones:

1.- La Santa Misa y la Santa Comunión de su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad.
Implora al Señor una gran fe en el sublime misterio de la Santa Eucaristía. Que podamos decir como el Apóstol Santo Tomas: "Señor mío y Dios mío". También podemos orar como el hombre del evangelio: "Señor, creo, pero aumenta mi fe".



2.- Visita al Santísimo
Haz un hábito de ir a visitar al Santísimo Sacramento tan frecuentemente como te sea posible. Cada vez que veo un templo, trato de entrar a visitarlo para que cuando yo muera y vaya a su Presencia, el Señor no me mire y diga: "¿Quién eres? No te conozco".

En una amistad verdadera, los amigos charlan frecuentemente y disfrutan de su compañía. De esa manera debemos hacerlo también con nuestro Amigo, cuando lo visitamos y le hablamos en el Santísimo.

3.- Comunión Espiritual
Alfonso María de Ligorio y posteriormente el Papa Benedicto XVI en su documento de exhortación apostólica sobre la Eucaristía Sacramentum Caritatis; recomendaron la práctica frecuente de la Comunión Espiritual.

Puede hacerse de una manera muy simple y tan frecuentemente como tu corazón lo desee. Puedes hacerlo con una oración muy sencilla como esta:

"Mi Señor Jesús, creo que estás real y verdaderamente presente en el Santísimo Sacramento dentro del Tabernáculo en Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad. En este momento no puedo recibirte sacramentalmente, pero ven por lo menos espiritualmente a mi corazón".

Entonces recíbelo en tu corazón y agradece, adora y ama a tu Señor que ha llegado espiritualmente a tu alma. Esto puede enardecer tu amor por Jesús Sacramentado.

4.- Meditar el Capítulo 6 del Evangelio de San Juan
El Evangelio de Juan capítulo 6 contiene tres partes: Jesús multiplica los panes, camina sobre las aguas y ofrece un discurso sublime relacionado a la Eucaristía; que en realidad se trata de una profecía a cerca de la Eucaristía.

Se conoce mejor como el discurso del "Pan de Vida" que Jesús nos promete. Aquí mismo es en donde Jesús declara en términos nada confusos, que nuestra salvación inmortal depende de que comamos Su Cuerpo y bebamos Su Sangre; lo que obviamente se refiere a la Sagrada Comunión. Recomiendo que leas y medites este poderoso capítulo evangélico. 

5.- Los Quince Minutos
Hace algunos años se hizo la publicación de un pequeño folleto llamado "Los quince minutos en compañía de Jesús Sacramentado". Es una pequeña joya que nos anima a iniciar un pequeño pero profundo diálogo con Él.

Básicamente, Jesús quiere ser nuestro mejor Amigo y nos reta a que le abramos nuestro corazón y le contemos nuestros secretos, ya que solo Él puede comprendernos y sanarnos. Lee y ora este escrito si es posible, frente al Santísimo Sacramento.



6.- La Hora Santa
Puedes hacer el hábito de pasar una hora diaria frente al Santísimo Sacramento, ello transformará tu vida si perseveras en esta práctica.

El gran siervo de Dios, el Arzobispo Fulton J. Sheen que practicó diariamente la Hora Santa por quince años,  la llamaba LA HORA PODEROSA.

7.- Adornar y embellecer los Templos y la Eucaristía
Una mujer derramó su costoso perfume de nardo en los pies de Jesús, ella lloró y sus lágrimas rodaron en los pies de Jesús; al final, ella secó las lágrimas con su cabello (Lucas 7,36-50).

El Arzobispo Fulton J. Sheen hacía hincapié de que este gesto simbólico de amor y atención debemos manifestarlo también en la manera en que adornamos, embellecemos y procuramos la belleza en las Iglesias, Templos y Tabernáculos donde mora Jesús.

Conocido por su espíritu de penitencia, ayuno y sacrificio, el Cura de Ars viajaba largas distancias y gastaba grandes sumas de dinero en comprar solo lo mejor para su pequeña Iglesia. ¿Por qué? Por la simple razón de que Jesús es el Rey de Reyes y Señor de Señores, y aun así se digna morar en el Tabernáculo y descender de los Cielos en las manos del sacerdote en cada Hostia consagrada. "¡Venid y Adoremos!"

8.- La Santa Misa y la Santa Eucaristía
Por supuesto que la mejor acción en todo el universo es la celebración del Santo Sacrificio de la Misa. El mejor gesto que cualquier ser humano puede hacer es asistir a Misa y recibir la Santa Comunión con fe, devoción, veneración y especialmente con gran amor.

Cuando te sea posible, asiste a Misa diario. Llega a tiempo para prepararte. Ofrece tus intenciones privadas. Participa activa y conscientemente en la Santa Misa. Y recibe la Sagrada Comunión como si fuera la primera vez, la última vez y la única vez. Muéstrate muy agradecido por tu fe en este sublime y majestuoso misterio.



No corras para irte al terminar la Misa; a su vez, dedica un tiempo para dar abundantes gracias a Jesús por tan hermoso regalo. De hecho, la palabra proviene del griego εὐχαριστία, eucharistía, que significa "acción de gracias"
¡Que inconmensurable regalo, que se recibe gratis, sin costo alguno! La única condición para su provecho es tener una gran fe y el corazón lleno de amor para recibir a Jesús, el Amor de los Amores.

9.- Los A.C.T.OS
Recuerda que los cuatro principales motivos para celebrar el Santo Sacrificio de la misa son los A.C.T.OS que se mencionan a continuación:

A - Adoración.
El principal propósito de la Santa Misa es ofrecer una adoración a Dios Padre, ofreciendo a Jesús como Víctima, con el poder el Espíritu Santo.

C - Contrición.
Nuestros corazones deben estar contritos y humildes para arrepentirse de todos los pecados cometidos.
Es una gran práctica el ofrecer la Misa y Comunión en reparación por nuestros pecados, los pecados de nuestra familia y los del mundo entero
"Por su dolorosa Pasión, ten Misericordia de nosotros y del mundo entero".

T - Tiempo para dar gracias.

Todo lo que tenemos en nuestra vida, con excepción de nuestros pecados, es gracia y regalo de Dios.
Por lo tanto, debemos estar agradecidos y expresar con abundancia el agradecimiento del corazón. Con el Salmo oremos:
"Da gracias a Dios porque Él es bueno; su amor perdura para siempre"

OS - Oración y Súplica.

Debemos ofrecer nuestra oración y súplica para interceder incesantemente por todas las necesidades del mundo, la Iglesia, la conversión de los pecadores, los enfermos, los moribundos, las necesidades personales y familiares, las almas del Purgatorio y tantas cosas más.

10.- Ser misionero eucarístico
Una vez que María recibió a Jesús en la Anunciación, se dispuso rápidamente a ir y llevarlo con su prima Isabel. De la misma manera, debemos llevar a Jesús con otros y otros a Jesús.

Esto lo podemos lograr en una manera muy concreta, al alentar a las ovejas pérdidas a regresar al rebaño. Desafortunadamente son tantas, que el segundo grupo religioso más grande de Estados Unidos está integrado por Católicos no practicantes.

Encuentra el tiempo, la forma y la iniciativa para invitar a las almas de regreso a la Iglesia. Ojalá, él o ella realice una buena confesión y regrese a recibir el Santo Sacramento en unión amorosa con Dios Padre, a semejanza del hijo pródigo. Todo se puede lograr si tienes fe en que Dios tendrá el control mientras que tú tengas la iniciativa para recibirlos de nuevo.

DOS GRANDES NOVENAS A LOS SAGRADOS CORAZONES DE JESÚS Y MARÍA

SAGRADOS CORAZONES DE JESUS Y MARIA


Estas dos grandes Novenas no son oraciones sino que se trata de comulgar los Primeros Viernes y Sábados de Mes durante NUEVE meses seguidos en reparación a los Sagrados Corazones de Jesús y de María.

HISTORIA: 
La Santísima Virgen favoreció con abundantes locuciones y visiones extraordinarias, durante varios años, a Sor Natalia Magdolna (1901-1992), religiosa húngara, nacida cerca de Pozsony (en la actual Eslovaquia), perteneciente a la congregación de Hermanas del Buen Pastor de Sta. Mª Magdalena de Keeskemet.
Su vida estuvo llena de gracias sobrenaturales y de una intensa comunicación con Dios. Murió en olor de santidad, siendo de edad ya avanzada.
Las promesas que a continuación ofrecemos, están entresacadas de varios mensajes que Jesús y María le comunicaron, y que fueron editados en el libro "La Victoriosa Reina del Mundo" por Ediciones Xaverianas, S.A. de C.V. - Ave. Juan Palomar y Arias 694 - Prados Providencia - A.P.1/133-44100 Guadalajara, Jal. (MÉXICO). Puede leer o descargar el libro completo "La Victoriosa Reina del Mundo", haciendo clic aquí.
El Padre Jeno Krasznay, Director Espiritual de Sor María Natalia por algún tiempo, renombrado teólogo europeo y Auxiliar del Obispo Isvan Hasz, declaró verídicas estas experiencias místicas, así como las visiones y mensajes, tras un largo período de investigación y examen. 

Dice Sor Natalia: 
El 15 de agosto de 1942, Jesús me dio una enorme gracia. Durante una visión me dio una gran promesa para aquellos que hicieran una novena en honor de su Sagrado Corazón y del Corazón Inmaculado de María. Me dijo:
-Hija mía, mira a tu Madre como Reina del Mundo. Ámala y trátala con la confianza de un niño. Esto lo quiero de ti y de todos.
Entonces levantó un poco el manto de su Madre, me mostró su Inmaculado Corazón y, volteándose hacia el mundo, dijo:
-He aquí el Corazón Inmaculado de mi Madre en el que he puesto mis gracias para el mundo y para las almas. Este Corazón es la fuente de mis gracias, del que fluyen la vida y la santificación del mundo. Como el Padre celestial Me lo dio todo a Mí, del mismo modo Yo le di mi victorioso poder sobre el mundo y sobre el pecado al Inmaculado Corazón de mi Madre. A través de mi hija, Margarita María Alacoque, la prometí al mundo grandes cosas, pero como mi bondad es infinita ahora ofrezco todavía más.
-Si la gente desea ganar los beneficios de mis promesas debe amar y venerar el Inmaculado Corazón de mi Madre. La señal más grande de esta veneración es que comulguen, bien preparados y arrepentidos en nueve sábados primeros, paralelamente con los nueve viernes primeros. Sus intenciones deberán consolar a mi Corazón al mismo tiempo que al Corazón Inmaculado de mi Madre.
Entendí que Jesús estaba pidiendo lo mismo para su Madre que lo que había pedido a santa Margarita para sí mismo. Le pregunté a Jesús:
-¿Debemos consolar también a tu Madre, ya que ella recibe tantas ingratitudes?
Jesús respondió:
-Querida hija, si alguien me hiere, esta persona hiere también a mi Madre. Si alguien me consuela, consuela al mismo tiempo a mi Madre, porque mi Madre y Yo somos uno en el amor.
Cuando el Salvador me dijo esto, entendí muchas cosas sobre la unidad de los dos Sacratísimos Corazones.
Jesús me dijo también que si alguien se confiesa con regularidad una vez por mes, no hace falta que se confiese para ir a la comunión, si no ha cometido ningún pecado mortal desde la última confesión. Jesús me enseñó esta oración para los primeros sábados:
«Sacratísimo Corazón de Jesús,
te ofrezco esta santa comunión
por medio del Corazón Inmaculado de María,
para consolarte por todos los pecados
cometidos contra Ti».

Las 33 promesas de Jesús para aquellos que hagan la doble novena

  1. Todo lo que me pidan por medio del Corazón de mi Madre –a condición de que la petición sea compatible con la voluntad del Padre- lo concederé durante la novena.
  2. Sentirán en cada circunstancia la extraordinaria ayuda de mi Madre, junto con sus bendiciones.
  3. Paz, armonía y amor reinarán en sus almas y en las almas de los miembros de sus familias.
  4. Protegeré a sus familias de contrariedades, engaños e injusticias.
  5. Los matrimonios se mantendrán juntos y, si uno ya se ha ido, él o ella, volverá.
  6. Los miembros de sus familias se comprenderán unos con otros y perseverarán en la fe.
  7. Las madres, en particular las que esperan, recibirán una especial protección para ellas, así como para sus hijos.
  8. Los pobres recibirán alojamiento y comida.
  9. Los llevaré a amar la oración y el sufrimiento. Aprenderán a amar a Dios y a sus prójimos.
  10. Los pecadores se convertirán sin dificultad aunque sea otra la persona que hace esta novena por ellos.
  11. Los pecadores no volverán a caer en su estado anterior. No solamente recibirán perdón por sus pecados sino que, a través de una perfecta contrición y amor, recuperarán la inocencia bautismal.
  12. Aquellos que hagan esta novena en su inocencia bautismal (especialmente los niños) nunca ofenderán a mi corazón con pecados graves.
  13. Los pecadores que se arrepientan sinceramente escaparán no sólo del infierno sino también del purgatorio.
  14. Los creyentes tibios se volverán fervorosos, perseverarán y alcanzarán la perfección y la santidad en un corto tiempo.
  15. Si los padres u otros miembros de la familia hacen esta novena, ninguno de esa familia será condenado al infierno.
  16. Mucha gente joven recibirá el llamado a la vida religiosa y al sacerdocio.
  17. Los descreídos se volverán creyentes y aquellos que andan sin dirección volverán a la Iglesia.
  18. Los sacerdotes y religiosos permanecerán fieles a su vocación. Los que no fueron fieles recibirán la gracia de una sincera contrición y la  posibilidad de regresar.
  19. Los padres y la gente en posiciones de mando recibirán ayuda en sus necesidades espirituales y materiales.
  20. El cuerpo estará libre de tentaciones del mundo y de la carne.
  21. El orgulloso se volverá humilde; el impetuoso se volverá amoroso.
  22. Las almas fervorosas sentirán la dulzura de la oración y el sacrificio; nunca serán atormentadas por la inquietud o la duda.
  23. Las personas agonizantes no sufrirán los ataques de Satanás. Se irán súbitamente, con una muerte inesperada.
  24. Los moribundos experimentarán un deseo vehemente de la vida eterna; de este modo, ellos se abandonarán a mi voluntad y se irán de la vida en los brazos de mi Madre.
  25. Sentirán la extraordinaria protección de mi Madre en el juicio final.
  26. Recibirán la gracia de tener compasión y amor hacia mi sufrimiento y el de mi Madre.
  27. Aquellos que se esfuerzan por ser perfectos obtendrán como un privilegio las principales virtudes de mi Madre: humildad, amor y pureza.
  28. Estarán acompañados con cierta alegría exterior e interior y con paz a lo largo de sus vidas, estén enfermos o sanos.
  29. Los sacerdotes recibirán la gracia de vivir en la presencia de mi Madre sin ninguna adversidad.
  30. Aquellos que progresen en su unión Conmigo recibirán la gracia de sentir esta unión. Sabrán lo que significa: «ellos ya no vivirán, sino que Yo viviré en ellos». Es decir, amaré con sus corazones, oraré con sus almas, hablaré con sus lenguas, y serviré con todo su ser. Experimentarán que lo bueno, hermoso, santo, humilde, manso, valioso y admirable en ellos, soy Yo. Yo, el Omnipotente, el Infinito, el único Señor, el único Dios, el único Amor.
  31. Las almas de aquellos que hagan esta novena estarán radiantes como lirios blancos alrededor del Corazón de mi Madre por toda la eternidad.
  32. Yo, el Divino Cordero de Dios, unido con mi Madre y con el Espíritu Santo, nos regocijaremos para siempre viendo las almas que a través del Inmaculado Corazón de mi Madre, ganarán la gloria de la eternidad.
  33. Las almas de los sacerdotes avanzarán siempre en fe y en virtud.

La gran promesa de María 

«Las puertas del infierno estarán cerradas el primer sábado de cada mes. Nadie entrará al infierno en ese día. Sin embargo, las puertas del Purgatorio estarán abiertas. Así muchas almas podrán alcanzar el cielo. Ésta es la obra del Amor misericordioso de mi Hijo. Ésta es la recompensa para esas almas que veneran a mi Inmaculado Corazón».
Cuando el Salvador me habló de los primeros sábados no estaba yo enterada que la Santísima Virgen en Fátima había pedido solamente cinco primeros sábados, en comparación con los nueve de los mensajes que yo había recibido. Por lo tanto, las autoridades de la Iglesia quisieron saber por qué el Salvador pidió nueve mientras la Virgen María en Fátima había pedido sólo cinco.
El Divino Salvador contestó: «La petición de mi Madre de cinco sábados es signo de su humildad. Aunque Ella es glorificada en el cielo, vive en el espíritu de la humildad y por lo tanto Ella no se considera merecedora de recibir ninguna devoción que sea igual a la Mía. Mi petición es una señal de mi amor, que no puede soportar la idea de recibir más que Ella quien está tan unida a Mí en este amor».

Por esto entendí que la razón por la que debe hacerse reparación en los nueve primeros sábados es porque Jesús pidió nueve viernes para Él a santa Margarita María Alacoque. Con eso nosotros consolaremos a Jesús y honraremos a Nuestra Señora, entregándonos a ella, y así por medio de su Inmaculado Corazón llegaremos a Jesús.

PROMESAS A LOS SEIS, NUEVE Y CINCO PRIMEROS JUEVES, VIERNES Y SÁBADOS DE MES


SEIS PRIMEROS JUEVES DE MES

Promesa hecha por Jesús el 25 de febrero de 1949

“Hija mía, haz que yo sea amado, consolado y reparado en mi Eucaristía. Haz saber en mi nombre que cuantos hagan bien la comunión con sincera humildad, fervor y amor, durante los seis primeros jueves de mes consecutivos y pasen una hora de Adoración ante mi sagrario en íntima unión conmigo, les prometo el Cielo.

Di que honren, por medio de la Eucaristía, mis santas llagas, honrando primero la de mi sagrada espalda, tan poco recordada.

Quien al recuerdo de mis llagas una la de los dolores de mi Madre bendita y por ellos nos pida gracias espirituales o corporales, tiene mi promesa que serán concedidas, a menos que no sean daño para sus almas. En el momento de la muerte traeré conmigo a mi Santísima Madre para defenderlos”.


Resumen de las condiciones

a)  comunión con sincera humildad, fervor y amor al menos seis primeros jueves de mes seguidos
b)  una hora de adoración al Santísimo Sacramento
c)  honrando la llaga de la espalda y las demás (por ejemplo, las de los clavos y la lanza)

Promesa hecha el 25 de febrero de 1949

“Hija mía, haz que yo sea amado, consolado y reparado en mi Eucaristía. Haz saber en mi nombre que cuantos hagan bien la comunión con sincera humildad, fervor y amor, durante los seis primeros jueves de mes consecutivos y pasen una hora de Adoración ante mi sagrario en íntima unión conmigo, les prometo el Cielo.

Di que honren, por medio de la Eucaristía, mis santas llagas, honrando primero la de mi sagrada espalda, tan poco recordada.

Quien al recuerdo de mis llagas una la de los dolores de mi Madre bendita y por ellos nos pida gracias espirituales o corporales, tiene mi promesa que serán concedidas, a menos que no sean daño para sus almas. En el momento de la muerte traeré conmigo a mi Santísima Madre para defenderlos”.

“Habla de la Eucaristía, que es prueba de amor infinito, que es el alimento de las almas.

Di a las almas que me aman, que vivan unidas a mí durante el trabajo, en sus casas, sea de día que de noche, se arrodillen a menudo en espíritu y con la cabeza inclinada digan:

‘Jesús, te adoro en cada lugar donde moras sacramentado, te hago compañía por aquellos que te desprecian, te amo por aquellos que no te aman, te doy alivio por aquellos que te ofenden. Jesús, ¡ven a mi corazón!”

“Estos momentos serán para mí de gran alegría y consuelo. ¡Qué crímenes se cometen contra de mí en la Eucaristía!

“Que la devoción a los sagrarios sea bien predicada y propagada, porque por días y días las almas no me visitan, no me aman, no reparan,…No creen que yo vivo allí. Quiero que en las almas se encienda la devoción hacia estas prisiones de Amor…Son muchos los que, aún entrando en las iglesias, ni siquiera me saludan y no se detienen un momento a adorarme.”

“Lejos del Cielo, lejos de Jesús son todos los que están lejos del sagrario… ¡Oh, si el sagrario fuese bien comprendido! El sagrario es la vida, es el amor, es la alegría, es la paz. El sagrario es el lugar de dolor, de ofensas, de sufrimiento. El sagrario es despreciado; Jesús del sagrario no es comprendido”

“Yo querría muchos guardias fieles, postrados ante los sagrarios, para no dejar que ocurran tantos y tantos crímenes!”

“Que me pidan todo cuanto quieran estando ante mi presencia, delante del sagrario. Es de allí que viene el remedio para todos los males.”

El Señor le explicó el motivo por el cual Alexandrina, viviendo los últimos 13 años de vida de la sola Eucaristía, sin alimentarse con nada más. Le dijo:

“Hago que tú vivas sólo de mí, para mostrar al mundo el valor de la Eucaristía, y que es mi vida para las almas… Háblales a las almas, hija mía, háblales del Rosario y de la Eucaristía! El Rosario! El Rosario! El Rosario! La Eucaristía, mi Cuerpo, mi Sangre!”

NUEVE PRIMEROS VIERNES DE MES

A los que vivan la devoción a su Sagrado Corazón

A partir de la primera revelación, 
Santa Margarita María Alacoque sufriría todos los primeros viernes de mes, hasta su muerte, la experiencia mística de la llaga del costado de Jesús. Estos eran los momentos particularmente elegidos por el Señor para manifestarle lo que quería de ella y para descubrirle los secretos de su amable Corazón.
Propósito de la devoción: Reparación al Corazón de Jesús.
Las promesas de Jesús dada por medio de Santa Margarita María Alacoque a los que practicaran y propagaran dicha devoción. Incluye la promesa a quienes comulguen nueve primeros viernes de mes.

El motivo principal de la devoción debe ser el amor a Jesús y no solo las promesas ligadas a ella. Sin embargo si el mismo Jesús quiso darnos un aliciente con sus promesas, podemos legítima y provechosamente apoyarnos también en ellas para fortalecer nuestra débil voluntad para todo lo que es el servicio de Dios.

Para ganar esta gracia debemos:


1-Recibir sin interrupción la Sagrada Comunión durante nueve primeros viernes consecutivos.
2-Tener la intención de honrar al Sagrado Corazón de Jesús y de alcanzar la perseverancia final.
3-Ofrecer cada Sagrada Comunión como un acto de expiación por las ofensas cometidas contra el Santísimo Sacramento.
4-Oración: "Oh Dios, que en el corazón de tu Hijo, herido por nuestros pecados, has depositado infinitos tesoros de caridad; te pedimos que, al rendirle el homenaje de nuestro amor, le ofrezcamos una cumplida reparación. Por Jesucristo nuestro Señor. R. Amén.
Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío."

Promesas 
(1) Les daré todas las gracias necesarias en su estado de vida.
(2) Estableceré la paz en sus hogares.
(3) Los consolaré en todas sus aflicciones.
(4) Seré su refugio en su vida y sobre todo en la muerte.
(5) Bendeciré grandemente todas sus empresas.
(6) Los pecadores encontrarán en Mi Corazón la fuente y el océano infinito de misericordia.
(7) Las almas tibias crecerán en fervor.
(8) Las almas fervorosas alcanzarán mayor perfección.
(9) Bendeciré el hogar o sitio donde esté expuesto Mi Corazón y sea honrado.
(10) Daré a los sacerdotes el don de tocar a los corazones más empedernidos.
(11) Los que propaguen esta devoción, tendrán sus nombres escritos en Mi Corazón, y de El,
       nunca serán borrados.
(12) Nueve primeros viernes: Yo les prometo, en el exceso de la infinita misericordia de mi
      Corazón, que Mi amor todopoderoso le concederá a todos aquellos que comulguen nueve
      primeros viernes de mes seguidos, la gracia de la penitencia final; no morirán, en desgracia ni
      sin recibir los sacramentos; Mi divino Corazón será su refugio seguro en este último momento.

CINCO PRIMEROS SABADOS DE MES

Lucía, vidente de Fátima, era postulante en el Convento de las Doroteas en Pontevedra, España cuando tiene una aparición de la Virgen sobre una nube de luz, con el Niño Jesús a su lado. La Santísima Virgen puso su mano sobre el hombro de Lucía, mientras en la otra sostenía su corazón rodeado de espinas. El Niño le dijo: "Ten compasión del Corazón de tu Santísima Madre. Está cercado de las espinas que los hombres ingratos le clavan a cada momento, y no hay nadie que haga un acto de reparación para sacárselas."
Inmediatamente dijo Nuestra Señora a Lucía:
"Mira, hija mía, mi Corazón cercado de espinas que los hombres ingratos me clavan sin cesar con blasfemias e ingratitudes. Tú, al menos, procura consolarme y di que a todos los que, durante cinco meses, en el primer sábado, se confiesen, reciban la Sagrada Comunión, recen el Rosario y me hagan compañía durante 15 minutos meditando en los misterios del rosario con el fin de desagraviarme les prometo asistir en la hora de la muerte con las gracias necesarias para su salvación"

Lucía le habló (a Jesús) de la confesión para los primeros sábados y preguntó si valía hacerla en los ocho días. Jesús contestó: "Sí; todavía con más tiempo, con tal que me reciban en estado de gracia y tengan intención de desagraviar al Inmaculado Corazón de María".
La intención de hacer esta reparación al Inmaculado Corazón de María puede ponerse al principio.

¿Por qué 5 Sábados?

Después de haber estado Lucía en oración, Nuestro Señor le reveló la razón de los 5 sábados de reparación:  "Hija mía, la razón es sencilla: se trata de 5 clases de ofensas y blasfemias proferidas contra el Inmaculado Corazón de María:
1-  Blasfemias contra su Inmaculada Concepción.
2-  Contra su virginidad.
3-  Contra su Maternidad Divina, rehusando al mismo tiempo recibirla como Madre de los hombres.
4-  Contra los que procuran públicamente infundir en los corazones de los niños, la indiferencia, el desprecio y hasta el odio hacia la Madre Inmaculada.
5-  Contra los que la ultrajan directamente en sus sagradas imágenes.”

"He aquí hija mía, por que ante este Inmaculado Corazón ultrajado, se movió mi misericordia a pedir esta pequeña reparación, y, en atención a Ella, a conceder el perdón a las almas que tuvieran la desgracia de ofender a mi Madre. En cuanto a ti procura incesantemente con tus oraciones y sacrificios moverme a misericordia para con esas almas".

CUARESMA: ORACIÓN, AYUNO, LIMOSNA Y LA OBRA DE CARIDAD MÁS GRANDE QUE PODEMOS HACER: OREMOS POR TODAS LAS BENDITAS ÁNIMAS DEL PURGATORIO.COMPARTE.


NUESTRA MADRE DEL CIELO NOS PIDE:

“Queridos hijos, hoy deseo llamarlos a rezar diariamente por las almas del Purgatorio. Por cada alma. La oración y la gracia son necesarias para llegar a Dios y a su amor. Haciendo esto, queridos hijos, obtendrán nuevas intercesiones que los ayudarán en su vida a darse cuenta de que las cosas terrenales no son importantes para ustedes, que solo el cielo es aquello por lo que es necesario esforzarse. Por lo tanto, queridos hijos, oren sin cesar, sean capaces de ayudarse ustedes mismos y a los demás, cuyas oraciones traerán alegría. ¡Gracias por haber respondido a mi llamada!” (6 de noviembre de 1986).

“Hay muchas almas en el purgatorio. También personas consagradas a Dios, algunos sacerdotes y religiosos. Recen por ellos. Al menos siete  Padrenuestros, Avemarías y Glorias y el Credo. Hay un gran número de almas que han estado en el purgatorio por un largo tiempo porque nadie ha rezado por ellas.” (21 de julio de 1982)

Unos días más tarde Nuestra Madre hizo hincapié en la importancia de los sacramentos para no pasar por el Purgatorio. Respondiendo a una pregunta sobre una persona que había llevado mala vida, preguntando ahora si estaba perdonada, Ella respondió: “Quien haya hecho mucho mal durante su vida, puede ir directamente al cielo si se confiesa y se arrepiente de lo que ha hecho y recibe la comunión al final de su vida.” (24 de julio, 1982)

Y HAGÁMOSLO ASÍ:

Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima Sangre de tu Divino Hijo Jesús, en unión con las misas celebradas hoy día a través del mundo por todas las benditas ánimas del purgatorio.

Padrenuestro, AveMaría y Gloria.

Repetir siete veces lo anterior.

Para finalizar oremos El Credo