Foto referencial. Foto: Pixabay.
El Gobierno de España implantó en las escuelas como obligatoria la asignatura de “Valores cívicos” y dejó como opcional para los alumnos la materia de Religión, la cual no computará para Selectividad.
La ministra de Educación, Isabel Celaá, presentó el anteproyecto de la nueva ley educativa en el Congreso de los Diputados en el Congreso de los Diputados el pasado miércoles 28 de noviembre.
La asignatura de “Valores cívicos” parece que será similar a “Educación para la ciudadanía” que se impartió durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y que entre otras cosas, promovía la ideología de género en las escuelas.
De hecho en julio de 2018 el Foro de la Familia ya alertó de la creación de esta asignatura y pidió a la ministra explicar si “respetará la neutralidad ideológica de los colegios públicos y la libertad de ideario de los concertados y privados”.
Según este nuevo proyecto, que según reconoció la ministra no deroga el plan anterior conocido como LOMCE sino que lo reforma, la asignatura de Religión seguirá siendo de oferta obligatoria para los centros y de elección voluntaria por parte de los alumnos y también evaluable aunque su calificación no computará para la nota media del alumno.
Según explicaron desde el ministerio, “como en todo proceso de aprendizaje, el docente deberá hacer entender a sus alumnos y alumnas lo que ya han aprendido y aquello en lo que necesitan seguir profundizando, y traducirá esta valoración en una nota”.
Sin embargo el hecho de que no compute para la nota media de acceso a la universidad o para la obtención de becas se explica en que “no sería justo para quienes libremente eligen no cursar esta materia”.
Es una medida, que según afirmó Celaá “se atiene estrictamente a los acuerdos firmados con la Santa Sede”. En este anteproyecto no se contempla la oferta de una asignatura para quienes no elijan cursar Religión.
Por su parte, la asignatura de “Valores cívicos y éticos” se impartirá de manera obligatoria en primaria y secundaria y responde, según la opinión de la ministra Celaá, a “una demanda clamorosa de la sociedad” para “formar a las futuras generaciones en la igualdad, la prevención de la violencia o el compromiso con la sostenibilidad”.
Sin embargo, en julio pasado el Foro recordó que son los padres los que “tienen el derecho a educar a sus hijos conforme a sus valores y creencias y que el Estado no puede imponer visiones particulares”.
Por su parte el actual Secretario General y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Mons. Luis Argüello, declaró recientemente que les hubiera gustado que “se hubiera dado un diálogo” antes de que se hiciera pública la reforma educativa.
“El Gobierno actual, cuando estaba en la oposición, reclamaba diálogo y pacto educativo. Nosotros también decíamos ahora que queremos diálogo y pacto educativo”, aseguró Mons. Argüello.
El próximo 3 de diciembre está prevista una reunión entre la Ministra de Educación, Isabel Celaá y el Secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Mons. Luis Argüello, como respuesta a una petición realizada en julio por la CEE para tratar el tema de la asignatura de Religión dentro del programa educativo en España.
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