LA PENA DE MUERTE Y EL ABORTO

EL REINO DE DIOS (Confidencias del Señor,) ¡Hijos míos todos! Cuando anunciáis el REINO de DIOS, sus DIEZ MANDAMIENTOS Y MI EVANGELIO no vais contra nadie, ni ofendéis a nadie, siempre que lo hagáis correctamente, con mansedumbre y con paz, sin imponer ni obligar, sino anunciándolo y comunicando las Palabras que el Espíritu Santo pone en vuestra boca, salidas del corazón. Con vuestra forma propia de hablar y expresaros, sin disimulos y sinceramente, mirando a los ojos de quien os escucha, porque así podréis conocer si os escuchan con agrado o no. Y si veis que estáis que estáis molestando, o que no se aceptan vuestra palabras, dejad de hablar, no discutáis y alejaos al momento, no perdáis el tiempo, “ni deis las cosas santas a los perros (la Palabra de Dios) ni deis vuestras perlas a los puercos (vuestros sentimiento espirituales), no sea que las pisoteen con sus pies, y revolviéndose os destrocen” (Hechos 2, 8-11.).

Porque el único que se considera atacado y molestado con mi Palabra es Satanás y sus secuaces, mi enemigo y vuestro, nuestro opositor y con él no se debe dialogar, es inútil y peligroso. Por eso “debéis ser prudentes como serpientes, pero sencillos como palomas, porque sois como ovejas en medio de lobos” (Mateo 10,16). Pero, hijos míos, APRENDED DE MI, QUE SOY MANSO HUMILDE DE CORAZON Y HALLAREIS DESCANSO PARA VUESTRAS ALMAS (Mateo 11, 29-30).

¡Hijos míos todos! Escuchad estas Palabras de Amor y Sabiduría divina, porque las palabras de los hombres no siempre están inspiradas por Dios, sino que hay muchos espíritus entre vosotros que no son de Dios. Debéis pedir el Espíritu Santo con sus Dones y discernimiento, para distinguir el Bien del Mal, porque hoy los hombres impíos lo están cambiando todo, tomando el BIEN como un mal, y el Mal como un bien. Es inaudito, pero es una realidad en vuestros días y sociedades, sería muy extenso exponer aquí algunos ejemplos de esto que os digo, sólo voy a deciros uno, y es: la PENA DE MUERTE ha sido abolida en casi todos los países que se tienen por civilizados, pero al mismo tiempo han aprobado la ley del ABORTO, la cual permite matar en el seno materno a miles de seres humanos, cada día, o sea que por un condenado a muerte que no mata dándoselas de “humanos, matan a miles de niños inocentes que no tienen culpa de nada.

¿En qué sociedad estáis viviendo, hijos míos? Porque en Sodoma y Gomorra (Génesis 19, 24-25.) no se conocía la Palabra de Dios, como la conocéis vosotros, y Dios la castigo calcinándola con fuego del Cielo, por sus grandes pecados y corrupciones.

En estos días merecéis muchos y mayores castigos que esas ciudades corrompidas, pero Dios no os quiere tratar igual, porque mando al mundo a su divino Hijo para reconciliar al mundo con El.

Llegue Yo al Mundo, y ya desde el primer momento el Rey Herodes me persiguió para matarme, siendo un recién nacido, pues tenía miedo de que Yo, el Mesías, le quitara su reino. Pero Yo no le quito nada a nadie, hijos míos al contrario, doy todo lo que tengo: mi Amor, mi Paz, las Palabras del Padre y el perdón de los pecados. Eso sí que os quito, los PECADOS para que podáis subir al Cielo y no bajéis a los infiernos.

Te Bendigo a ti y a las personas unidas a ti en la fe y en el amor fraterno.

Ámame mucho. Tú sabes que Yo te amo.