DE ROSAS PARA LA GOSPA
Decir sí a Dios me da una gran alegría. Él me hizo vidente para darles esperanza, dijo la vidente de Medjugorje Marija Pavlovic-Lunetti cuando su aparición fue transmitida en directo desde Notre Dame, IN, el 15 de noviembre. Marija recomienda la consagración a María y cita los buenos resultados de Sicilia.
Todo el mundo es libre de decir sí o no a Dios. Pero la alegría se encuentra solamente en decir que sí, explicó la vidente Marija Pavlovic-Lunetti a los asistentes en la Universidad de Notre Dame, IN (EE.UU.), desde donde sus 4 minutos y medio que duró la aparición fueron transmitidos en vivo el 15 de noviembre en Mary TV.
“¿Por qué razón ha venido aquí Nuestra Señora? Para decir: “¡Levántate! Da este testimonio. Yo soy el Dios de la Resurrección. Yo soy el Dios que fue crucificado y murió. ¡Pero estoy resucitado! Yo estoy contigo, y morí por ti. Sin embargo, te doy la libertad. En esta libertad tienes que elegir: Bueno o malo. Los invito a la bondad de Dios”, dijo Marija.
“Y Nuestra Madre dice: “Los invito a una nueva vida. Es su elección, es su opción de decir sí o no”, continuó.
“Mi testimonio de hoy para cada uno de ustedes es que dije “sí” con toda mi vida. (…) Pero lo que me trajo aquí es la gran alegría que tengo en mi corazón. Y me gustaría decirles que me siento muy feliz porque, a través de la Virgen, Dios eligió para mí estar aquí con ustedes y para decirles que Dios es Amor. Él me eligió para ser la esperanza y la alegría de cada uno de ustedes”, dijo la vidente.
Para que el sí a Dios por medio de la Virgen María sea más completo y más fuerte, Marija recomendó a la gente consagrar al Inmaculado Corazón de María no sólo a ellos mismos, sino también a sus familias y a los lugares donde viven. Ella explicó lo que pasó cuando lo hicieron juntos en la isla italiana de Sicilia:
“Sicilia decidió ofrecer un día a Nuestra Madre, para ello todas las escuelas estuvieron cerradas y se les pidió a todas las personas que fueran a los santuarios de Sicilia. Y un sacerdote le pidió a la Virgen que consagrara Sicilia, diciendo que aquí estaba toda esta gente, alcaldes, escuelas, y que le ofrecían nuestros corazones, nuestras familias, nuestra nación”, contó Marija.
“Durante la aparición, la Virgen dio una respuesta a esa oración y dijo: “No sólo tú, sino también tus hijos y los hijos de tus hijos serán bendecidos”. Yo estaba tan sorprendida, Nuestra Señora miró a todos los presentes. ¡Cuántas gracias recibió este trocito de Italia! Incluso hoy en día muchas de estas personas vienen a Medjugorje para dar gracias por este día de Nuestra Madre”.
Además, Marija llamó al Papa Benedicto XVI “la Providencia de Dios para nosotros actualmente”:
“El Papa Benedicto XVI nos pide un año de la fe. A él le gustaría ayudarnos en el camino para que crezca nuestra fe. Para nosotros el Papa Benedicto XVI es realmente la Providencia de Dios, porque necesitamos ser fuertes. Y él es como un general. Tan resistente. Oremos por él, para que nos alimente a través de su Catecismo, que es realmente hermoso y profundo”, dijo Marija.
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