Os digo que cuando recéis el Santo Rosario cada uno de vosotros, o en total unidad con vuestras familias o vuestros hermanos, no sólo lo repitáis, si no, os ruego, que meditéis cada una de sus palabras y oréis el Rosario a JESÚS. Yo, amado hijo, como Madre de todos vosotros os lo pido, y no sólo os lo pido, si no os aconsejo a cada uno de vosotros que améis con todas vuestras fuerzas a DIOS, con vuestros corazones y con vuestras mentes y con vuestros sentidos. Os ruego rezad el Rosario, uníos con vuestras familias, comenzad, si no lo hacéis, a partir de este preciso momento. Os lo ruego por el mundo y por todos aquellos que padecen y sufren en cada rincón de los distintos continentes. Y quiero que comprendáis que no debéis temer porque todos vosotros estáis bajo mi Manto Sagrado, bajo mi Amparo Maternal y mi Amante Corazón.
Al orar, pequeños míos, no tenéis idea cuánto estáis ayudando a través de ello a un mundo que sufre, que padece los flagelos de aquellos poderosos; de las guerras, de los que padecen hambre y sed, de los que se encuentran enfermos, solos y abandonados, de los niños abandonados, de los jóvenes que se drogan y se pierden en la inmensa oscuridad. Por ello, os ruego que oréis. No sabéis cuánto estáis ayudando con vuestras oraciones. Si oráis como se debe y hacéis penitencias, no importa cuántas sean; un Ave María dicho con el corazón y todos los sentidos tiene más poder que diez Rosarios repetidos por aquellos que no hacen más que una rutina de sus oraciones. Es a vosotros, a los que dudáis y tenéis el corazón descreído a quienes hago este ferviente llamado como Madre de JESÚS. Tengo potestad para haceros la promesa de amparar a quien rece diariamente el Rosario ofreciéndole al Padre por las llagas dolorosas de mi Hijo, el amor a DIOS y a sus semejantes irá, amados hijos míos, formando la corona de salvación por medio de la cual atravesarán los rayos de luz de mis Gracias para haceros agradables al Creador y curar tantas heridas y llagas sangrantes que veo entre vosotros con tal que recitéis el Rosario.
Os pido y os ruego que siempre averigüéis más sobre la maravillosa obra de la creación de mi amado Señor. Alabad su grandeza y no os preocupéis tanto por los ataques del enemigo, estáis protegidos, amados hijos míos, por mí, y en tanto recitéis el Santo Rosario, nada debéis temer, él puede asustarse, y no se acercará más a un alma consagrada al CORAZÓN DE JESÚS y al mío.
OS AMO, QUERIDOS HIJOS DE MI CORAZÓN. REZAD SIEMPRE, AMADOS HIJOS.
SANTA MARÍA MADRE DE LA IGLESIA
13/09/2014 18:49 Horas
DOCK SUD - CIUDAD DE AVELLANEDA - PROVINCIA DE BUENOS AIRES - REPÚBLICA ARGENTINA
Para pedidos de oración de los miembros del Cenáculo SANTA MARÍA MADRE DE LA IGLESIA:
www.lavozdesantamaria.com.ar
TODOS AQUELLOS HERMANOS Y HERMANAS QUE QUIERAN ESCRIBIR A JOSÉ LUIS BELMONTE O PEDIR ORACIONES, LO PUEDEN HACER AL CORREO jlbelmonte07@yahoo.com.
ar. ÉL LES CONTESTARÁ.
JOSÉ LUIS BELMONTE
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