Amar al prójimo como a uno mismo es mucho más difícil de lo que piensas

Gabriela Chionetti

Hija Mía, este es ahora el momento de escuchar Mis instrucciones, para alertar a Mis hijos de los tiempos por delante, en términos de preparar a todos Mis seguidores, en su necesidad de permanecer en oración diaria. Ellos también deben recibir Mi Cuerpo en la forma de la Santa Eucaristía y rezar por la salvación de las almas.

Mis hijos están poniendo más atención a Mis mensajes, mientras se reúnen a rezar por todos Mis hijos, cada día antes de que el GRAN AVISO se lleve a cabo.

Miren a sus hermanos y hermanas a través de Mis ojos, que los ven como una creación milagrosa, otorgada por Mi Padre como un regalo a la humanidad. Cada alma en cuestión es amada igualmente, ninguna diferencia es hecha ante los ojos de Mi Padre.

Si ustedes, Mis seguidores, Me aman, amarán a Mi Padre. A su vez, si son genuinos en su amor a Mi Padre, amarán a sus hermanos y hermanas. Deben especialmente mostrar amor por aquellos que pueden ofenderles por su comportamiento. Algunos les insultarán, se burlarán y dañarán su reputación, lo cual puede herirles a ustedes y a su familia. Pueden ser conocidos personales suyos o ellos pueden herirles por sus acciones, que gravemente afecten a su habilidad de vestir y alimentar a sus familias. No importa cuánto la gente les hiera les pido, en Mi Nombre, que sigan Mi liderazgo. Recen por ellos, especialmente por aquellos que les dañan, porque cuando ustedes rezan por ellos, diluyen el odio arrojado por Satán. Un odio que podría hacer brotar pensamientos de venganza.

Esta es una de las más difíciles de Mis enseñanzas, amad a vuestro prójimo como a ti mismo. Es mucho más difícil de lo que piensan. Cuando ustedes puedan alcanzar este acto de gran generosidad, Me ayudarán a realizar Mi plan de salvar más almas.

Su Amado Maestro y Amigo, Jesucristo