01-04-2012
(Domingo de Ramos)
Jesús:
Margarita de mi Corazón de Padre. Corazón de Amor. A menudo no podéis verlo. La Verdadera Vida. Que es la Vida en Gracia. La Vida del Amor. La Vida dentro de mi Corazón. A menudo no podéis verlo. Pensáis que es mentira. Que no es cierta. Y la vida de la mentira, la del pecado, el mundo, el Demonio y la carne, ¡la creéis la Verdadera! Satanás ha conseguido embaucaros con su mundo de mentira. Creéis todos sus presupuestos. Sus presupuestos básicos filosóficos. Él ha conseguido colárseos por medio del lenguaje y las ideas. Ha metido otras ideas, para que olvidéis a La Palabra. Y La Palabra no puede venir a dejarse oír su Voz en vosotros. ¡Por eso es por lo que os suscito Profetas! Hoy, como en otro tiempo. Pero hoy es más necesario que nunca.
(Ahora pasan unos chicos/as jovencitos, hablando de cosas soeces. Tengo la ventana abierta).
¿Quién los rescatará? Amada, y luego dime que tu Mensaje era falso, que no era verdadero y que no era necesario. Hija mía: la figura de este mundo, pasará.806 Construid la Jerusalén Celeste. ¡Ésta es eterna! Mirad el Camino que Dios ha elegido para vosotros. Y aceptadlo. Y seguidlo con entusiasmo. Aunque no entre en vuestros planes. Observad, preguntad cuáles son los Planes de Dios. Y los Planes de Dios para cada uno de vosotros. Sólo así seréis felices.
Querida: quien piense que este Mensaje dado a ti para todos los de tu pueblo no era importante ni necesario, se encuentra entre los necios y los que, sin seso, no pueden entender ni oír. Conociéndolo, conocerán que es urgente y necesario. Los hombres pensáis que podéis vivir al margen de Dios, haciendo todo lo que os venga en gana. Sin ateneros a ninguna de sus consecuencias. Construís vuestras vidas a espaldas de Su Ley y de Su Amor. Luego le exigís que os procure una vida cómoda.
Si tenéis alguna desgracia, lo consideráis la excusa perfecta para justificaros en vuestro estilo de vida: “¿Veis? No le importo a Dios. Dios no es Bueno. Dios no me ama. No tengo por qué seguir sus mandatos.” Todos los corazones, le han dado la espalda a Dios. Por eso es por lo que Yo os he enviado a mi Madre. Para que os llame a conversión. Os recuerde que Yo existo, y que existen unas Leyes de la naturaleza y unas Leyes de los hombres, las que son de Dios. Y que construir vuestra vida al margen de Dios, sólo os traerá la desdicha y la ansiedad, la falta de paz en esta vida, y os acarreáis así la condenación futura. Pero los hombres no la habéis querido hacer caso. Tan sólo éstos mis pequeñuelos. Los que oyen mi Voz. A los que Yo les pude rescatar del Desastre. Tan sólo ellos. No se pudo salvar a todos, porque no todos querían ser salvos. Quise acogeros a todos. Aquí, cabe mi manto. Dentro de él. Pero no todos quisisteis acogeros a mis Palabras.
Envié un Vocero de confianza: a mi Madre. Muchos la rechazasteis. Ella me prepara al mundo para mi Segunda Venida. Para mi Reinado Eucarístico. Donde todo tendrá su culmen y centro en la Eucaristía. ¡Pero Yo no puedo venir a Reinar donde reina la suciedad y podredumbre! Os contemplo, y vuestras almas son una pura ruina. ¡Si os pudierais ver por dentro, para entender! Y eso sucederá. Y ya queda menos. Viene pronto.807 ¡Oh, a algunos! ¡Cuánto me cuesta suscitaros! ¡Cuánto me cuesta cambiarlos y que den un giro de vida! Lo que en algunos es la labor de años, ¡de lustros!, se conseguirá en un momento en el día de mi Gran Milagro. El mayor Milagro será el cambio de los corazones. Y ésa será la última oportunidad dada al mundo para cambiar. Los que no cambien a partir de eso, ya no cambiarían por mucho que se les diera y muchos más milagros y gracias del Cielo que recibieran. A partir de ahí, debo enviar los Castigos a mi humanidad. Que no es uno, sino varios. Todos esos Castigos, no son determinantes ni están fijos. Son condicionales. Dependen mucho de vuestra reacción. Y de vuestra capacidad de cambio y de conversión.
En España, en concreto, la azotará un gran desastre natural y una cruenta guerra civil. Tengo que deciros, que la guerra ha sido atenuada por el rezo y el sacrificio y oblación de unos pocos. De aquellos que escucharon mi Mensaje, y creyeron. Y se ofrecieron como Víctima Propiciatoria al Amor Misericordioso. ¡Mirad brillar sus almas por siempre en el Cielo! También habrá pestes y epidemias, enfermedades. Ocasionadas por la carestía alimentaria y sanitaria. Os volveré al tiempo en que erais indigentes. A ver si así os acordáis de Mí. Y después de todo este periodo horrible, que puede ser alrededor de 3 años, vendrá el Castigo de Fuego. Terminando por aniquilar todo lo que no es de Dios. La Nueva Humanidad resurgirá de esas Cenizas. ¡Y ya no será el llanto ni el rechinar de dientes! Una humanidad limpia y renovada. Pero, ¡qué lejos todo esto que te explico de vuestros planes y de lo que creéis que son los Juicios de Dios!
¿Cómo os lo digo, hijos míos? Es que ya, ni cuando Yo bajara a cada uno de vosotros, delante de él en Persona, y les repitiese estas palabras, iban a creer. Que ya no creen nada. Que ya no creen nada, Amor mío, y tentado estoy de abandonarles a su suerte. Daré, a cada una de estas Palabras, el poder de la Unción del Espíritu, pero mucho mayor que nunca. Porque mayor que nunca es la abominación y la desolación. Mayor que nunca el frío en los corazones. Mayor ha de ser la Gracia.808 Mayor que nunca. Y el instrumento, por ende, más pequeño, menor que nunca. Porque mi Poder se manifiesta en la sencillez y pequeñez. Cuanto más pequeño sea el instrumento, más me manifiesto Yo. Y más se sabe que viene de Mí. Más se me ve. Porque sus cualidades no me hacen sombra. Pisotea, bajo tus pies, todo lo que hay en ti de afán por sobresalir. Toda vanagloria. Todo orgullo. Todo engreimiento. Toda obra mundana. Toda carne y todo Demonio. Aleja de ti el pecado. Y mantén a raya tu yo. Así podré Yo actuar.
A todos los que leéis estas páginas, y os sentís identificados y las consideráis Verdad, os digo: Hacedme de intermediarios, como ella. Mi mano, al ir a caer sobre vosotros, perdida humanidad, se encontrará delante una primera fila de almas víctimas, que, con su Amor, aplacarán la Justa Ira de Dios. Y los Castigos serán reducidos.
Y podré conservar al menos un reducto de la humanidad. Ya renovada.
A todos los que leéis estos escritos, los consideráis verdaderos y os sentís identificados, os digo: Haced como ella. Hacedme de intermediarios entre Yo y la humanidad. Quizá así consiga salvar al menos a un reducto de la población. La población de la tierra en los días aciagos de la Gran Tribulación. ¡Oh, qué rápidamente pasarán a vuestros ojos las cosas que considerabais importantes, a ser una minucia! Ahora no podéis verlo. Pero qué rápidamente lo harán. Vivid desde ahora así. Para que no os cueste tanto. Despreocupaos del mundo y la carne, dando la espalda al Demonio y al pecado. Haced la prueba. Quiero que viváis desde ahora así. Viviendo la Verdadera Vida en Dios. Dios Amor. No Temor. ¡Vivid para la vida! No para la muerte. Yo no quiero aniquilaros. No deseo vuestra perdición.809 Venid con amor al Amor. Amén. Te bendigo, hija. Puedes ir en Paz.
806 Cfr. I Co 7,31.
807 Se refiere al Aviso.
808 Cfr. Rm 5,20.
809 Cfr. Ez 18,23; 33,11; Sb 11,26.
No hay comentarios:
Publicar un comentario