23-05-2001
Virgen:
Hay mucha oscuridad y confusión en vuestros días, mucha falta de fe.
La inmensa
mayoría son paganos, no creen en Dios y menos en Cristo. Si acaso conservan su
amor de cuando eran niños a Mí, pero eso, hoy, no les sirve como les servía
entonces, porque acordarse de Mí y rezarme una Ave María al día o encender una
vela o incluso asistir al oficio, no es nada si no va acompañado de una recta moral
traducida en obras cotidianas.
¡Qué falsa piedad y falsa bondad! Menudos rostros
que contemplo mirando estatuas289, pero con los ojos de la mente volando a mil
fantasías o tontas preocupaciones de paganos, de hombres sin fe. Y todavía creerán
que España es mariana. ¡Qué pena de fe! ¡Qué oculta la fe, qué echada a perder! En
algunos ni aun escarbando con excavadoras podríamos encontrar un resquicio de
verdadera fe, tan enterrada está, y ya se ha descompuesto con el suelo.290
Madre, estos días, ¿no se te alaba?
Hija, esa alabanza me da ganas de llorar. Los únicos, los niños, y los que sois como
niños. En los que aún no ha entrado la corrupción, esas bocas sí prorrumpen en
alabanzas hacia Mí cuando recitan, aunque sea un simple Ave María, porque en sus
vidas no reina el pecado, reina el amor, sus vidas blancas pueden ser ofrecidas a Mí
sin rubor, pues les avalan las obras del amor.
“Si no os hacéis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos”291. No quiero
la “falsa infancia espiritual” del aparentar sencillez y tener tontos criterios de fe
inmadura y pesimista.
La auténtica fe, el amor auténtico, se basa en sólidos pilares,
reforzados al paso del tiempo con los trabajos292 y sudores de hombres maduros
que, en su madurez, buscaron hacerse como niños al confiar sobremanera en Dios,
porque se han conocido a fondo a sí mismos y comprendido en lo que son: nada.
289 No dice imágenes sino estatuas, porque no tienen vida para ellos
290 Se ha desvirtuado para desaparecer luego
291 Cfr. Mt 8,3.
292 Formación, fe alimentada, curtida y probada en las dificultades.
25-05-2001
Jesús:
Todo está tan tranquilo, Jesús.
Sí, todo está en aparente calma, pero por dentro bulle el terremoto293
.
Las estructuras de vuestra sociedad están apoyadas sobre bases no sólidas de barro
y van a ser derrumbadas una a una. Los edificios que construisteis los hombres,
derribados uno a uno, detrás de uno otro. Son cargas endebles.
Defendedme, defendedme. Defended la Eucaristía, defended a la Inmaculada.
Sostenedme, sostenednos. Los únicos pilares sólidos que quedarán después del
Desastre serán la Inmaculada Concepción y la devoción a mi Eucaristía.
El
verdadero Amor a los Corazones de Jesús y de María, Rey y Reina consorte. Reyes
verdaderos de la tierra294, cuando Yo establezca mi reinado entre vosotros, cuando
Yo venga, derrumbando tras de Mí a todos los edificios de muerte.
El hombre, olvidado de Dios, construyó sus propias obras de muerte con sus
propias manos. En el advenimiento de la Vida a la tierra, no puede quedar en pie
ninguna de esas obras de muerte. Yo derrumbaré, uno a uno, vuestros edificios
construidos bajo pilares sin solidez. Pretenden subir, pero sólo bajan, porque no
quedará en pie nada construido por la mano del hombre habiéndose olvidado de su
Creador.
En la defensa de los pilares, la sangre de los mártires será semilla de nuevos santos
y valientes; algunos morirán, y apoyados en ellos, subidos en ellos, mis santos
construirán la nueva Jerusalén, que bajará del Cielo, es decir, entre Cielo y tierra no
habrá diferencias.
Oh Marga, ¡educad hijos para el mañana!, un mañana luminoso, lleno de luz, en el
que Yo vendré, purificando el suelo, para hacer de él mi Reino Celeste.
293 Se caldea por dentro, en ebullición hasta que explote y salga fuera.
294 Lectura de hoy: “Tú eres el Rey de la tierra”
29-05-2001
Jesús:
Yo os transformaré, no os vais a reconocer.
El Espíritu entrará en vosotros y os
dará la vuelta. No se parece en nada cómo seréis y cómo sois ahora. Confiad,
confiad en Mí. Seréis presentados a empresas difíciles, pero Yo estaré contigo, Yo
estaré con vosotros. No tengáis miedo y emprendedlas. Cuando Yo las pongo en
vuestro camino es porque las podréis hacer. No tengáis miedo, no tengáis miedo.
Insignificantes en número, mas poderosos por el Espíritu. Poco valiosos en lo
humano, ricos en mi Misericordia.
Yo os preparo, preparaos, preparaos vosotros, con la formación, con la oración, con
el estudio, preparaos.
Vienen momentos difíciles, muy difíciles. Mis débiles ovejas
tienen que hacerse fuertes en mi Corazón. Fuertes en mi Amor, Poderosos por el
Espíritu. Sólo la persona que me ame mucho y que se deje llevar por el Espíritu,
saldrá vencedora. Acudid a mi Madre, sabrá deciros cómo.
Aprended, aprended, Yo os pongo ejemplos alrededor para que toméis nota y
sepáis qué se os pide, observad, y aprended.
Vosotros no sois ingenuas ovejas, no quiero que se os considere ingenuos y
alejados de la situación real de vuestro tiempo. Estáis en el tiempo, sabéis y
conocéis los males que le aquejan, pero no formáis parte de ellos, no habéis entrado
a formar parte con ellos. Sabéis de lo que habláis, porque también sois hijos de
vuestro tiempo, mas no en el tiempo. No sois tan espirituales que os habéis olvidado del cuerpo; no, tenéis cuerpo, pero éste se halla sometido al espíritu,
conocéis cómo tira para abajo, pero os habéis hecho “duchos” en someterlo, con
vuestra práctica espiritual, con vuestros hábitos buenos, con vuestra lucha
constante, lucha que no es por la lucha en sí, sino por el Amor, hacia el que tienden
todos vuestros actos.
No empleéis tiempo en quienes no quieren cambiar, dejadlos, dejadlos. Aun entre
vosotros, a los más reacios al cambio, abandonadlos. Dejadlos, están en mis Manos.
Dedicaos al campo abierto de los que no conocen a Dios porque nadie nunca les ha
hablado de ello. Dedicaos a los que están aún por evangelizar.
Presentad la verdad en todo su atractivo. Para eso, antes, dejaos atrapar por ella y
que os inunde hasta el fondo de vuestro ser.
Vivid felices en la Verdad. La Verdad os hace libres,295 os hace plenos, dichosos.
Mostrad esa alegría al mundo.
Id, id y predicad mi Evangelio a todas las gentes. Id al mundo entero y proclamad
el Evangelio,296 la Buena Nueva de la Salvación:
Decid: “la Verdad sólo está en
Cristo. Venid y conoced a Cristo, encontradlo en nosotros y a través de nosotros.
Con nosotros está, venid a conocerle. Amén. Aleluya”
Id: la Verdad os hará libres.297 Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda
criatura.298
295 Cfr. Jn 8,32.
296 Cfr. Mc 16,15.
297 Cfr. Jn 8,32.
298 Cfr. Mt 28,18.
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