MADRID, 17 Jun. 16 / 09:18 am (
ACI).- Decenas de miles de personas participaron en el acto de desagravio que el Cardenal Antonio Cañizares convocó el jueves 16 de junio, tras la profanación de la imagen de la Virgen María en un cartel del lobby gay.
El Purpurado convocó al acto de desagravio luego de la difusión de un cartel en el que aparecen besándose las imágenes de la Virgen de los Desamparados y la Virgen de Montserrat, con el lema: “Contra la sagrada opresión. Ama como quieras”.
El cartel fue usado por el lobby LGTB para convocar a la manifestación del orgullo gay que tendrá lugar el próximo sábado 18 de junio en Valencia.
“Ofrecemos este acto por la reconciliación de todos, por la unidad y la convivencia”, afirmó el Cardenal Cañizares al inicio del acto de reparación.
El Cardenal recordó que “no venimos a ningún acto político, ni a ninguna protesta. No venimos con ninguna bandera, ni representando a ninguna sigla. Se confunden y desfiguran por tanto los que vengan en otro sentido, venimos manteniendo sencillamente el sentido religioso que convoca este acto”.
El Arzobispo de Valencia también oró “muy particularmente por las víctimas del atentado de Orlando, y todas las víctimas de cualquier violencia, de todo acto de terror. También de todos los perseguidos o maltratados a causa de su fe o de su condición, por el cese de toda violencia contra la persona humana y su dignidad”.
Por eso destacó su “público agradecimiento a quienes dando voz a su diversidad, han condenado esta ofensa, porque no les representa. Y por tanto, si alguna herida queda, aquí en este acto de amor a la Virgen, rezamos para pedir perdón por todas las ofensas y restablecer la convivencia y el diálogo, por el respeto a las personas en su derecho a la libertad religiosa y la libertad de conciencia”.
En ese sentido subrayó que se trataba de “un acto para todos porque en este Homenaje a la Virgen de los Desamparados caben todos, ya que forma parte de nuestra identidad cultural”.
El Arzobispo agradeció la enorme participación de los valencianos, así como de personas de toda España que se habían movilizado para la ocasión.
Durante la celebración del acto de desagravio, el Cardenal Cañizares afirmó luego que “de mí no esperéis otra cosa que no sea que os enseñe la verdad aunque algunos no la toleren, pero yo debo hacerlo porque Dios quiere que lleguéis al conocimiento de la verdad, aunque me crucifiquen”.
Además precisó que “la ideología de género, que todo lo cifra en lo que uno decide y no hay más, no hay naturaleza, ni cuerpo, ni hombre y mujer, ni verdad, todo lo que decide el hombre, sus sentimientos y Dios desaparece por completo, no hay creación, no somos criaturas de Dios”.
El Cardenal subrayó también que “el mal de esta ideología, la peor de todas las ideologías de la historia, que siguiendo la voz del espíritu trata que Dios no esté entre nosotros” y cuestionó cómo callar ante esta situación. “Sería un mal obispo y yo quiero ser un buen obispo, el vuestro”.
Además insistió que “aunque a algunos les pese la verdad de la
familia, es la que trae la paz y sin ella no habrá paz, ni justicia porque es en ella donde se aprende a amar, a ser amado, a vivir en la confianza y perdonando”.
“Necesitamos la familia y esta ideología la destruye por ello no podemos callar y es necesario que reaccionemos”, manifestó.
En la celebración eucarística en la Catedral de Valencia, concelebraron casi cien sacerdotes y varios obispos, entre ellos los de las diócesis de Orihuela-Alicante, Mons. Jesús Murgui y de Segorbe-Castellón, Mons. Casimiro López, así como el Arzobispo Emérito de Zaragoza, Mons. Manuel Ureña; el Obispo Emérito de Lleida, Mons. Juan Piris, el Obispo de Alcalá de Henares, Mons. Juan Antonio Reig Pla; el Obispo de la dióceis de Tortosa, Mons. Enrique Benavent y el Obispo emérito de Mondoñedo-Ferrol, Mons. José Gea.
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