Hemos traducido una entrevista en exclusiva concedida por Mirjana al portal de noticiasAcqua&Sapone. Es una entrevista muy extensa que se la facilitaremos en varias entregas.
El décimo secreto es para todos
Yo he tenido apariciones diarias hasta el día 25 de diciembre de 1982, día en que la Virgen me dio el décimo secreto y me dijo que debía escoger el sacerdote que lo debía comunicar al resto.
A este sacerdote, se lo debo decir con 10 días de antelación. Debo comunicarle lo que sucederá y en qué lugar. Posteriormente, durante 7 días haremos ayuno y oración y 3 días antes del evento, el sacerdote tendrá que comunicárselo a todos. Él no tiene derecho a escoger si hacerlo o no, si él acepta esta responsabilidad tiene que hacer la voluntad de Dios. La Virgen siempre dice que no debemos hablar de los secretos, sino que debemos rezar, porque quien siente el Amor de la Madre y de Dios – que es Padre – no ha de tener miedo de nada. Ella dice que sólo aquellos que no han conocido aún el Amor de Dios deberían tener miedo. Ella dijo: “Lo que yo he comenzado en Fátima, lo acabaré en Medjugorje, mi corazón triunfará”. Así que, si el corazón de nuestra Madre va a triunfar, ¿a qué hemos de temer?
Un signo para todos sin terror
La Virgen ha dicho que dejará un signo sobre la colina de las apariciones, que será como un regalo para todos nosotros, para demostrar que Ella ha estado aquí entre nosotros. Será algo divino, imposible de hacer con manos humanas. Se escriben muchas cosas para asustar a la gente, pero no es verdad que después no habrá más tiempo para convertirse. La Virgen no ha dicho nunca una cosa así. He leído también en un libro que la Virgen ha dicho que ésta sería la última vez que vendría a la tierra, pero no es cierto. La Virgen ha dicho que será su última vez en la tierra, de este modo.
Ya que hablamos de esto, les quiero decir como hermanos y hermanas que somos, que no gasten dinero comprando todos aquellos libros de las tiendas, porque el 90% de todos estos libros no escriben la verdad. Es un problema, porque son escritores que vienen a Medjugorje, pasan 10 días y ya escriben un libro. Agarren el rosario, agarren el libro de oraciones, eso es lo importante y lo que nos salvará. No serán esos libros los que nos salven. Ésta es mi opinión. Cuando rezo el rosario, en el momento de las meditaciones, lo primero que hago es contarle todo a Dios, hablo con Él, y luego recito la decena.
El dolor por los no creyentes
Cada día 2 de mes, la aparición es también para aquellos que no han conocido aún el Amor de Dios, y cuando veo el dolor en la faz de la Virgen –yo no he visto nunca un dolor similar en la faz de una persona, porque cada músculo de la cara de la Virgen habla de dolor- es demasiado doloroso y no es posible que no lo vivas tu también, y por esto creo que algunas veces mi cara expresa dolor y sufrimiento.
Nunca juzguen, más bien amen
Durante la aparición del día de Navidad de 1982, Ella me dijo que no tendría más apariciones diarias, que solamente vendría una vez y que sería cada 18 de marzo. Así durante toda mi vida. Ella me dijo que tendría también apariciones extraordinarias, que comenzaron el 2 de agosto de 1987, y han durado hasta ahora. Yo no sé hasta cuándo tendré estas apariciones cada día 2 del mes, lo que sí sé es que se habla de la oración para los que no creen. Aún así, la Virgen no los llama nunca “no creyentes”, ya que cuando tú llamas a una persona “no creyente”, ya la estás juzgando. La Virgen no hace esto. Ella nunca juzga, los llama “aquellos que no han conocido aún el Amor de Dios”, y pide nuestra ayuda.
Ella quiere que en las oraciones que le dirigimos todos los días, pongamos en primer lugar a los “no creyentes”. Ella siempre nos dice que el motivo de que sucedan tantas cosas terribles en este mundo (guerras, separaciones, suicidios, droga, abortos…) viene de los “no creyentes”. Ella no quiere que nos dediquemos a predicar, Ella pide que con nuestra vida seamos testigos, que los “no creyentes” puedan ver en nosotros el Amor de Dios. Yo los exhorto a tomarse esto enserio, porque si pudieran ver sólo una vez las lágrimas que la Virgen derrama de sus ojos por los no creyentes, estoy segura que rezarían con toda el alma, ya que Ella dice que este tiempo que vivimos, es un tiempo de decisiones y nosotros, que somos hijos de Dios, tenemos una gran responsabilidad.
Cuando la Virgen pide que recemos por los “no creyentes, quiere que hagamos como Ella, en primer lugar sentir amor por los “no creyentes”, sentirnos hermanos de ellos, que no han tenido la suerte – como nosotros – de conocer el Amor de Dios. Sólo cuando seamos capaces de sentir esto, podremos rezar por ellos: sin juzgar nunca, ni criticar, ni forzar, sino amándoles y rezando por ellos, dando ejemplo con nuestras vidas.
Falsa espiritualidad
Una tarde yendo a la iglesia para oír Misa, vi un sitio libre en un banco, donde estaban sentados unos peregrinos italianos. Todos empezaron a gritarme: “Levántate, este banco es nuestro, hemos venido antes, cómo te atreves”. Todos a la vez. Y me levanté enseguida, en ése momento, vino una señora que formaba parte del grupo y me reconoció. Cuando ella les dijo que yo era una de las videntes, ¡me ofrecieron todo el banco! Pero, ¿qué hubiera pasado si yo fuera una no creyente, que entraba por primera vez en una iglesia católica?, ¿Qué hubiera pasado si yo fuera no creyente y hubiera sentido la necesidad de entrar done los que creen dicen que está el Amor de Dios y resulta que me trataran de este modo?, ¿Querría entrar otra vez en una iglesia católica? ¿De quién será la responsabilidad?
La importancia de la Misa
Cuando éramos niños, al inicio de las apariciones, una vez la Virgen nos dijo: “Si un día debéis escoger entre verme a mí, tener las apariciones o ir a Misa… siempre debéis ir a Misa, porque en ella mi Hijo está con vosotros.” Durante estos años de las apariciones, la Virgen no nos ha dicho nunca: “rezad y yo os daré”, Ella siempre dice “Rezad para que pueda interceder por vosotros ante mi Hijo”. Jesús siempre está en el primer lugar.
Cada uno tiene su propia Cruz
Muchos peregrinos cuando vienen aquí piensan que nosotros, los videntes, somos privilegiados y que basta con pedirnos algo por que Dios nos escuchará más a nosotros que a los demás. Algunos incluso creen, que basta con tocarnos.
Esta actitud es errónea, ya que para la Virgen, como para una madre, no hay hijos privilegiados. Para Ella todos somos hijos suyos y Ella nos elige para cosas diferentes. A través nuestro (los videntes) damos los mensajes, pero la Virgen nos ha elegido a cada uno de nosotros.
En nuestra casa todos los días teníamos la presencia continua de los policías. Nunca sabíamos cuando venían y esto es lo que nos hacían: venían cada día y destruían todo a su paso. Me llevaban con ellos cuando yo sólo tenía 15 años y nunca sabía si me devolverían o no.
Yo pensaba: “La Virgen me ayudará, Ella me dirá algunas palabras”. Pero Ella no me decía nada al respecto. Cuando tenía las apariciones no me decía nada ni de mí ni de mi situación, y yo me sentía realmente sola. Después, con la oración comprendí que para la Virgen no hay privilegiados. Si estás mal, si tienes una cruz, lo que debes hacer es coger el rosario, reza y en seguida verás que Dios no te deja sola. Cuando logré entenderlo, pude soportar todo lo que nos hacían mucho mejor y con más fuerza.
Fuente: http://www.ioacquaesapone.it/articolo.php?id=1187
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