Mas de 100 familias, en Valencia, acogen a embarazadas, para que no aborten.

Cuatro de cada 10 gestantes que piden ayuda ni siquiera han cumplido los 17 años y la mayoría tiene problemas en casa
Más de un centenar de hogares de distintos puntos de la Comunitat ya han abierto sus puertas para que pueda llegar al mundo una nueva vida. «A

l menos 100 familias valencianas han acogido a alguna mujer embarazada a lo largo de los dos últimos años para ayudarlas en su gestación y evitar que aborten», estima el presidente de la Federación por la Vida y la Familia Vega Baja, Mauricio García.

Las gestantes que requieren de ayuda llegan a asociaciones como esta «desoladas y nerviosas». Cada una carga con una dura historia a sus espaldas. «En muchos casos arrastran problemas familiares, como que han recibido algún tipo de maltrato por parte de sus padres o de su pareja. En otros, las drogas están por medio. Además, el 50% tiene carencias educativas porque ha abandonado los estudios muy temprano», explica García.

La mayoría son jóvenes. En el 40% de casos que han pasado por su asociación, las chicas tienen entre 13 y 16 años. «Siete de cada 10 son españolas», añade. Para todas ellas estos matrimonios se convierten en su esperanza en medio de la desesperación.
Desde que en 2009, la Generalitat puso en marcha la ley de Protección de la Maternidad, donde se incluye el Programa + Vida, «22 familias de Torrevieja, Orihuela o Callosa del Segura ya han acogido a alguna embarazada», manfiesta García.
El plan contempla ayudas sociales, educativas, económicas y sanitarias. Las familias acogedoras constituyen uno de estos recursos. Las parejas que tienden la mano a estas chicas suelen tener ya varios hijos, están muy volcadas en ayudar a los demás y se oponen al aborto. Y prefieren mantenerse en el anonimato.
La estancia comienza varios meses antes del parto y se prolonga durante dos o tres más tras el alumbramiento. «Hemos detectado que muchas familias les han ayudado también a buscar un trabajo, bien en la misma casa en la que han estado o bien en un negocio propio», asegura García.
Para Maite Galiana, presidenta de la Asociación de Profesionales Más Vida de Alicante, lo fundamental en las parejas que se deciden a acoger en su casa a una embarazada «es que los dos estén de acuerdo y convencidos de dar ese paso».
«El acogimiento en una vivienda es uno de los recursos existentes. Ahora mismo en Alicante contamos con tres familias en reserva y hay otras dispuestas en Benidorm, Novelda, Santa Pola o Castalla», apunta Galiana. Pero lo primero es que las propias embarazadas pidan esa ayuda. «Tenemos una chica que está esperando un bebé y en su casa no tiene el ambiente adecuado pero prefiere seguir ahí», lamenta.

QUE MARAVILLOSA LABOR DE PROTECCION DEL NO NACIDO, Y SUS MAMIS!!!! QUE DIOS BENDIGA LA TAREA DE AMOR DE ESTAS FAMILIAS!!! OREMOS POR ELLAS!!