SANTA MARÍA MADRE DE LA IGLESIA.

04/05/2011 04:15 Horas.

Hijos míos, transcurren los años y cada minuto que transcurre en vuestras vidas es como si fuerais perdiendo todo el amor que hay en vuestros corazones, viven una vida totalmente agitada y volcada a lo material olvidando que lo único que puede llevar la paz a vuestros corazones es todo aquello que os traerá paz y armonía, que en las pequeñas cosas encontraréis la verdadera felicidad y en esa felicidad vuestro corazón se ha de llenar de luz pero de la luz divina que mi amado Hijo os entrega. No escucháis las palabras que pueden envolver vuestros corazones y llevarlos por un sendero de armonía, no pensáis un sólo minuto en el sufrimiento de vuestros hermanos en los distintos continentes, sólo pensáis en vosotros, en muchos, amados hijitos, veo mucho egoísmo y nadie sufre más que vosotros, nadie está más solo, nadie padece más. Si vosotros pudieran daos cuenta del dolor que se extiende a través de toda la tierra, del llanto en los ojos de mis pequeñitos y la soledad en la cual viven millones de ellos, en cómo padecen hambre, frío y soledad, de aquellos que no tienen un techo donde protegerse, de aquellos que están solos en medio de inmensas tempestades y de guerras llevados por los mismos hombres y pierden todo, pierden su niñez y su adolescencia entre el dolor y el más grande sufrimiento, y vosotros os preguntáis en dónde está vuestro Padre, vuestro Dios está a vuestro lado, Él nunca se aparta de al lado de cada uno de sus hijos porque estamos junto a cada uno con mi Hijo tratando de guiarlos, pero vosotros sí os apartasteis y cerrasteis vuestras puertas a nosotros, no queréis oír nuestras palabras y no queréis ni siquiera que os guiemos, qué podemos hacer si muchos de vosotros se han dejado tentar y sólo os dejáis guiar por aquellos que os mienten y os llenan de promesas de un mundo distinto, no os podéis dar cuenta que estáis siendo engañados con la astucia del ángel desterrado y de aquellos que están a su lado que son las fuerzas del mal, no podéis comprender que si no retomáis tras los pasos y volvéis al sendero estaréis perdidos y viviréis en vuestro mundo entre tinieblas hasta entrar en la oscuridad total, todo se perderá, perderéis lo más hermoso que poseéis que son vuestras almas y la felicidad después de pasar de vuestra vida en la tierra a la Vida Eterna, es allí, amados hijos de mi corazón, donde perderéis vuestras almas porque cuando lleguéis junto a mi amado Señor y las páginas del Libro de La Verdad y La Vida estén vacías o llenas de actos que no tienen nada que ver con el amor, os perderéis en la inmensa oscuridad y os alejaréis del Reino de los Cielos.
Yo sólo os ruego y os pido a todos vosotros, a todos mis pequeños, aquellos que profesáis y vienen a mi morada como a todos aquellos que os encontráis en distintas religiones que porque os encontráis contenidos, según vosotros, partieron de al lado de vuestro Padre, del Hijo y del Espíritu Santo y de esa forma fuisteis a abrazar una fe que nada tiene que ver con el amor de mi amado Señor y vosotros lo sabéis, muchos de vosotros me dejaron abandonada, se apartaron de mí y os dijeron tantas cosas que os llevaron a pensar que yo no existo y que mi Hijo en muchas religiones todavía no ha nacido. Yo no lo puedo comprender, hasta dónde llega la ambición del hombre, porque esto ocurre por ambición de poder, por querer ser el eje del mundo y olvidarse que antes que todos vosotros se encuentra mi amado Señor, mi Hijo que dio la vida y cargó con vuestros pecados, pero nada os importó con tal de tener seguidores y os creéis Dios en la tierra, no os dais cuenta del mal que estáis cometiendo al mundo y más aún a todos aquellos que con mentiras os llevan por un camino de oscuridad y os entregáis en las manos del ángel desterrado, no podéis comprender que estáis llevando a vuestro mundo a perderse entre las tinieblas, entre guerras terribles llevadas de la mano de satanás porque él, a quien llamo el ángel desterrado porque así lo es él, está gobernando vuestras mentes y vuestras acciones y no os permite meditar, porque si vosotros tomarais solamente unos minutos y meditarais, os puedo asegurar que volveríais a mi morada y os arrodillaríais a pedir perdón a mi Hijo y confesaríais vuestros pecados renunciando para siempre a las fuerzas del mal. Tenéis que hacerlo pequeños míos, tenéis que volver al sendero de la luz, TENÉIS QUE VOLVER A UNIRSE EN LA ORACIÓN Y REZAR EL SANTO ROSARIO, HIJOS MÍOS, EL SANTO ROSARIO LO CIEGA Y LO HACE CAER EN SU PROPIA OSCURIDAD, si todos os unierais y rezarais, el mundo os puedo asegurar cambiaría, pero os tenéis primero que unir y ver todo lo que habéis cometido, tenéis que volver a sentirse hermanos e hijos del mismo Padre y saber que vuestro Padre no tiene debilidades por un conjunto de hijos sino que os ama y abraza a todos por igual, pero quiere que comencéis a comprender que muchos os perdieron en la oscuridad y os sumergieron en el dolor, y ese dolor os está llevando al final de vuestros tiempos por no pensar, por no meditar, por no querer comprender que tenéis que volver a mi morada, A LA MORADA DE CRISTO JESÚS, A VUESTRA PROPIA MORADA, DONDE ESTARÉIS PROTEGIDOS Y CUIDADOS DE TODO ATAQUE DE LAS FUERZAS DEL MAL.
Os ruego desde mi corazón de Madre, volved a caminar en la unidad y volved a vivir en armonía y paz cargando vuestras cruces con infinito amor. Amén.
SANTA MARÍA MADRE DE LA IGLESIA.
04/05/2011 04:15 Horas.
AVELLANEDA – PROVINCIA DE BUENOS AIRES – REPÚBLICA ARGENTINA