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24-12-2015
Jesús: Los demonios no se comunican entre sí. No tienen buena comunicación. Es un reino dividido, donde uno se oculta a otro sus logros, para lograr triunfar por encima. Todos están subyugados y sometidos al Príncipe de los demonios, que ejerce sobre ellos una tiranía. Y al mismo tiempo que someterse a él y obedecerle les causa más horror, ellos lo desean para ser así más horrorizados. Desean el mundo del horror y sufrir y sufrir más. Hacer sufrir y someter todas las cosas al Príncipe de los demonios. Esos espíritus se agitan y cuando descubren a uno que lleva el Espíritu Verdadero, lo quieren “abducir”, como decís vosotros. Quieren absorberlo. Quieren absorber su vida, para quitársela y poder ser condenado como ellos. Y quieren que no se reparta vida a su alrededor. Cuidado con el espíritu maligno que habita en cada gente que tenéis a vuestro alrededor. No lo despertéis. Si tú sabes que tal y cual persona lo tiene, no lo azuces. Porque se vuelve contra ti. Deja habitar en ellos, pues poco puedes hacer contra un espíritu cómodamente instalado en alguien que no quiere prescindir de él. Si la persona quiere liberarse de él, ya es distinto. Y ha de ir a un exorcista. ¿Que no hay exorcistas? ¿Por qué? Meditad bien qué significa que no haya exorcistas en una diócesis, o en una ciudad o en un país. Se quitan para facilitar más el terreno por donde venga el Anticristo a pisar. (Ay. Qué horror. Veo al espíritu de las tinieblas en cada persona. Y esa cara de sonrisa fingida y ojos saltones con ademanes gays y chillidos. Voz chillona. Qué horroroso) ¿Y los confesores? Los confesores son los únicos que hacen por liberaros de las garras del pecado. Pero no quieren confesarse848. Y los confesores cada vez quieren confesar menos, pues salen de las confesiones muy dañados. Sólo resisten los santos, y los que en las confesiones se dedican a decir que ninguno de los “pecadillos sin importancia” que vienen a confesarse, son realmente pecados. La vida de los feligreses se unirá cada vez más a la de su párroco, en espera de “formar una familia”, que hasta en muchos casos se formará, y formará con hijos. ¡Ahora cualquier cosa llaman “familia”! ¡Ah, hija! Cada uno tendrá una vidente particular, como quien se compra un coche al servicio de una comunidad, de un grupo. Como proliferan las auténticas y las mentirosas, cada uno querrá tener una a su servicio. Se rifan y se intercambian. Como quien se intercambia un premio. ¡Ah!, ¡pobres ingenuas en las manos de paganos! Les sirven para realizar los nuevos ritos. Y ellas terminan peor. ¿Por qué hablas en femenino? Porque hay más mujeres que se prestan a esto. Las prefieren mujeres, porque son más dadas a dar (dadivosas), más altruistas y sacrificadas. Y también más vanidosas y necesitadas de afecto y de reconocimiento. A menudo esas “mujeres videntes” han llevado una vida dura, y obtienen en esto su premio a su dureza en su vivir. Como un descanso de atenciones849 en una vida ausente de ellas. Ellos os observan -los masones-, y ven quiénes sois las auténticas y quiénes no. Y a las auténticas las vetan, y a las (…) las promocionan y alientan.
Y mientras más puede proliferar el lío de los espíritus en un lado y en otro en una comunidad, mejor, ellos más contentos. Cuando encuentran una Comunidad sabiamente dirigida, les plantan el veto. El Ayuntamiento en connivencia con la diócesis se dejará saquear sus iglesias. Y después del saqueo, vendrá la profanación. ¿Cómo evitar eso? ¡Somos muy pocos! Cuando las personas conozcan esto, querrán ser del grupo que se ofrece. Pero es peligroso ofrecerte cuando no estás dispuesto a darte. Si adquieres un compromiso con Dios, Él, al final de tus días, viene a pedirte cuentas. Por eso, si no estáis dispuestos a dar lo que se os exige, no os ofrezcáis. Jesús nace hoy, y quiere nacer libre en vuestros corazones; para poder hacer. Los corazones de los hombres están apegados al dinero. Hoy, comulgad para reparar. Comulgad dos veces, sí. (La Misa de hoy y la de mañana en el mismo día, porque mañana tendremos más lío) Nacerá, y será profanado. En cada corazón que comulgue hoy en pecado. En cada comunión sacrílega.
NOTAS:
848 Los endemoniados o los fieles.
849 Muchas atenciones. Mimos.
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