13-02-2002
(Miércoles de Ceniza)
Jesús: Amada hija de mi España, escucha, escúchame: Amado Pueblo, ¿hasta cuándo tendré que soportar vuestro insolente hedor? ¿Hasta cuándo he de hacerlo? Decidme: ¿hasta cuándo? Mirad todas mis llamadas y mis llamadas a la penitencia desoídas y desoídas. ¿De verdad que mirasteis en el interior de vuestra alma y no visteis pecado? ¡Oh hijos!, ¡cómo estáis tan ciegos! Y mi Pueblo, ávido de placer, se entrega a sus orgías de los sentidos. Mirad: mi Pueblo os grita: “¡penitencia!, ¡penitencia!”. Porque mirad que si callan éstos, gritarán las piedras: “¡penitencia!” Y vosotros, desde vuestros púlpitos gritáis: “¡No arrepentíos!”, “¡no penitenciéis! Dejad esas prácticas para las viejas”
¡Oh oprobio que veo caer sobre vosotros y vosotros no os arrepentís! ¡Oh hijos!, ¡¿hasta cuándo soportar vuestro hedor que hacéis subir al Padre como oblación?! ¡Dios mío!, ¡sí!, ¡tengo que ser duro con vosotros porque vosotros habéis recibido tanto ...! Y no quisiera tener que llegar y no encontrar a mi Resto preparado. ¡Asesinos, asesinos de almas!433 Jesús mío: ¿quiénes son los asesinos de almas? Es el clero, son los dirigentes en España. Son los padres de familia, son los jefes. Son los que conducen a las masas tras de sí hasta caer en el abismo.434 ¡Oh Amada España!, mira que éste es mi último Llamamiento. Se os avecina un Gran Castigo si no estáis para arrepentiros, del cuál os veréis libres muy pocos. Sólo los que disponga mi Voluntad. Y para ello debéis estar preparados. Mirad que Yo vengo para advertiros. Mi Espíritu Santo ha sido derramado sobre vosotros en la forma simple que vosotros conocéis: ¡reconocedlo! Mirad que hoy, en esta Cuaresma, os llamo a la conversión. Quizá no dejaré que llegue otra Cuaresma más.
Quizá éste es el último tiempo con que contáis de salvación. Arrepentíos ahora. Vestíos de sayal y de cilicio.435 ¡Por favor, gritad mi arrepentimiento!436 Sabed que grandes responsabilidades recaerán sobre vosotros, oh jefes, si no lo hacéis. Y vendré Yo mismo para reclamároslas, no en breve, mas pronto. Pero ahora: ¡arrepentíos!, ¡arrepentíos! Gritad arrepentimiento. Proclamad conversión. Porque viene Yahveh, se acerca el Día de Yahveh y, ¿a cuántos he de encontrar preparados? Sí hija: reza, reza y ayuna, pues vengo, vengo Yo sobre las nubes del Cielo y, ¿os he de encontrar preparados? Es éste tu máximo trabajo, el primero y principal: ora y ayuna, salva así a la mayor parte que puedas de tu Pueblo. Colabora así Conmigo en la salvación. Y adorado sea Cristo y Glorificado, que por su Santa Cruz, redimió al mundo. Amén.
433 Este es un grito del Señor por todos los asesinos de almas, los que les llevan a la condenación.
434 Veía a grupos de gente conducida por alguien hacia el abismo. Y que esa gente caía. Diversos grupos de gente
435 Cfr. Gn 37,34; 2 S 3,31; 21,10; I R 21,27; 2 R 6,30; 2 R 19,1s; Jdt 4,10. 14; 8,5; 9,1; 10,3; Est 4,1-4; Jb 16,15; Sal 32,12; 35,13; 69,12; I Mc 2,14; 3,47; II Mc 10,25; Is 15,3; 20,2; 22,12; 37,1s; 50,3; 58,5; Jr 4,8; 6,26; 49,3; Ez 7,18; 27,31; Dn 9,3; Jl 1,8.13; Am 8,10; Jon 3,5s. 8; Mt 11,21; Lc 10,13.
436 Proclamad que se arrepientan. El arrepentimiento hacia Mí. Desde los púlpitos
No hay comentarios:
Publicar un comentario