Amado Pueblo Mío:
MI AMOR LES RECLAMA.
MI MISERICORDIA RECLAMA A MIS HIJOS.
Las faltas de amor Me laceran continuamente. El pecado obstinado del hombre Me corona de espinas, la falta de caridad y de perdón entre los hombres, Me crucifica una y otra vez.
¿Acaso piensan que Mi pasión quedó en el olvido? No hijos, Mi Pasión permanece en estado actual frente a toda la humanidad. Doliéndose con el que sufre, padeciendo con el afligido y desvalido, sumiéndose junto a aquellos que reparan por los que no Me aman y se rebelan insistentemente en contra de Mis llamados al amor, a la fe, a la esperanza y a la caridad.
DESEO DESPERTAR CON MI AMOR TODO LO BUENO QUE PREVALECE EN USTEDES.
EL SOL DE MI AMOR DARÁ LA LUZ NECESARIA
PARA QUE LA OSCURIDAD DEL ALMA DESAPAREZCA.
Pueblo Mío: ¿Les es tan difícil caminar en lo correcto y desechar lo mundano, lo fétido, lo pecaminoso? Le dan la espalda a la salvación obstinándose en razonamientos ilógicos.
¡Cuánto dolor, cuánto dolor asoma! ¡Cuánto dolor ha padecido recientemente la humanidad y cuánto dolor viene nuevamente sobre ella!
Oren, oren Pueblo Mío, oren por Japón padecerá nuevamente.
Oren por China, será flagelado.
No abren los ojos, caminan como ciegos espirituales negándose a sí mismos una sola oración. ¿Han olvidado a Nínive?
OREN E INTERCEDAN UNOS POR OTROS.
El dragón viene y con su fuego voraz avanza desde Medio Oriente, levantándose de ahí con fuerza en pos de la humanidad.
Nuevamente el agua lavará el pecado que han depositado sobre la Tierra. Un nuevo evento conmocionará la humanidad que será flagelada una y otra vez.
Oren, amado Pueblo Mío, oren por Mis hijos de Brasil, oren por Mis hijos de Brasil.
Oren, el agua es contaminada.
Oren para que se nutran y se alimenten espiritualmente.
Hijos: Oren, intercedan por toda la humanidad: doliente, sangrante, confundida y hambrienta. ¡Cuánto dolor, cuánto dolor se acerca en esa nube que está a punto de derramar todo cuanto ella contiene sobre el mundo!
Pueblo Mío, amado Pueblo Mío, caminan a pasos agigantados a encontrarse con la Purificación. No midan el tiempo a la manera humana, éste es Mi potestad. Y éste se ha acelerado porque no deseo que más hijos Míos se pierdan y he acortado el tiempo para rescatarles de los lazos del mal.
Ya vendrán tiempos en que Mi Amor reinará y Mi Pueblo se levantará glorioso; vendrá pronto el instante en que traeré por un corto espacio a muchos de ustedes para que no sufran.
PERO RETORNARÉ A MI IGLESIA Y MI IGLESIA ME ACLAMARÁ
Y YO SERÉ SU REY Y USTEDES SERÁN MI PUEBLO.
Les amo, les amo. Aquí estoy, Mi Misericordia no se cierra, retomen el camino de la verdad y de la santidad.
Les bendigo y les amo, atesoren estas palabras en lo profundo de su corazón y no se distraigan ante los llamados insidiosos del mal.
Les bendigo, queden en Mi paz.
VENGO POR USTEDES, VIVIRÁN ETERNAMENTE JUNTO A MÍ.
Su Jesús
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
COMENTARIO DEL INSTRUMENTO SOBRE EL MENSAJE
Hermanos (as):
NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO LLAMA A SUS HIJOS A SER SAL DE LA TIERRA Y A DAR SAZÓN AL MUNDO CON EL CONDIMENTO DEL AMOR.
No es fácil transformar el interior y los modos externos en amor. Pero no olvidemos que de lo que se tiene en el corazón habla la lengua.
Así que, se nos pide una transformación total para ser testimonios vivos del verdadero cristiano católico.
Los embates que se ciernen sobre la humanidad no cesan, sino al contrario surgen con más fuerza y esto no lo podemos negar, sólo que el hombre olvida pronto y retorna a su antiguo proceder.
Con el agua fue borrado el pecado mediante el diluvio. En este instante esta generación es purificada por el agua una y otra vez. El pecado no sólo carcome al hombre, sino que el hombre ha carcomido la Creación y ésta se rebela contra su devastador.
Acojamos con amor este llamado a la oración y a la conversión, porque urge, urge que la humanidad eleve plegarias que intercedan por lo que pronto sobreviene al mundo.
Dios es Misericordia, acojámonos a Ella con humildad.
Amén.
Lectura bíblica tomada del libro de Job, 38, 1-7
“Yavé respondió a Job en medio de la tempestad, y le dijo: «¿Quién es ese que oscurece mis designios y habla de lo que no sabe? Amárrate los pantalones como hombre; voy a preguntarte, y tú me enseñarás. ¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? ¡Habla, si es que sabes tanto! ¿Sabes tú quién fijó sus dimensiones, o quién la midió con una cuerda? ¿Sobre qué están puestas sus bases o quién puso su piedra angular, mientras cantaban a coro las estrellas del alba y aclamaban todos los hijos de Dios?”
Biblia Latinoamericana
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