Por: Eleonora Bruzual
Univision Radio
Hace pocos días nos enteramos de algo realmente vergonzoso. Para ser más precisa debo decir que además de vergonzoso, aterrador, ya que nos devela la verdadera dimensión de una campaña orquestada a nivel mundial contra los cristianos, y en especial contra la Iglesia Católica.
Resulta que además de venir observando desde hace años a Europa claudicar ante el chantaje de los musulmanes, una Europa dominada por el pragmatismo que la lleva a permitirles imponer su credo a la vez que obligan a borrar los símbolos y rasgos de la cristiandad a un continente para el que ese credo es su propia esencia. Y claro, esto va creciendo… Como toda campaña muy bien orquestada se ramifica, ataca distintos elementos de la cultura, de la tradición, de las mismas leyes y los mismos valores éticos y morales del hombre y la mujer de cada país, en el cual una fusión perversa, terrible, canallesca entre islamismo e izquierdismo extremo los acosa, los intimida, los aterra y los lleva a una resignación suicida…
Les comenté de esa noticia que debería encender alarmas no sólo en España sino en el mundo cristiano en general, esa noticia que da cuenta de cómo –sin exageración alguna- ya se puede asegurar que el mal gusto, el irrespeto y por supuesto la depravación se han instalado en la que alguna vez fue la prestigiosa Universidad Complutense de Madrid, donde este pasado 10 de marzo en horas del mediodía un grupo de 70 malandrines de ambos sexos entraron violentamente a una de las Capillas de oración, la del campus de Somosaguas. Allí parlantes en mano leyeron consignas grotescas contra la Iglesia Católica, contra sus sacerdotes y en específico contra el Papa Benedicto XVI.
Una vez dentro, amenazando al capellán y a algunos estudiantes que a esa hora rezaban en la capilla, varias zafias se dirigieron al altar, lo rodearon, tiraron muchas de las piezas del culto al suelo, y luego decidieron desnudarse. Dos de esas delincuentes en potencia, refiere una de las alumnas que rezaba en ese momento de irrumpir la bandada, se dedicaron a prácticas lesbianas en pleno recinto religioso, mientras el resto profería vítores y aplausos… Refirió la periodista María Isabel Serrano, del Diario ABC de España que posiblemente los sacerdotes que tienen a su cargo este recinto religioso interpongan una denuncia en la comisaría de Policía de Pozuelo de Alarcón, municipio al que pertenece este campus de la Universidad Complutense, aunque sin esperanzas de ser escuchados, ya que estos ataques e irrespetos no son nuevos y simplemente van creciendo en bestialidad.
Ya es conocido el estado de inmundicia en el que se encuentra la Universidad Complutense de Madrid, llena de graffitis y pintas obscenas en paredes, estatuas, monumentos… Pareciera que es esa inmundicia, ese destrozo, esa aberración es la que contenta a los progres, a esas hipocritísimas figuras de una izquierda canalla, que ampara racistas, violentos, aberrados, delincuentes, libertinos. Parece que esa escoria se ha adueñado de los famosos claustros universitarios para imponer su extorsión, su chantaje, su aberrante ambición de ser la única voz y la única verdad… La escoria progre, le da un Doctorado Honoris Causa a un militarote primario y cuartomundista como Hugo Chávez, pagando así las dádivas que éste le ha otorgado a infelices como Juan Carlos Monedero, líder de estos grupos vergonzantes y quien forma parte del cuadro profesoral de la Complutense, que con su degradación cubre de vergüenza a cualquiera que haya egresado de sus aulas…
Así está pues la Complutense de Madrid, así Europa toda, dominada por miedos y ambiciones que la llevan a desdibujarse y a renunciar a su esencia cristiana… Así está el mundo, donde una campaña orquestada contra la Iglesia Católica nos atiborra de noticias sesgadas, de ataques, de acoso… Son los mismos que satanizan al Estado de Israel, los mismos que odian a los judíos, los mismos que aman a los terroristas… Y lo peor es que frente a la cantata progre que repite y repite lo de los curas pedófilos sentando casi es la norma y no la excepción, nadie en los medios les replica.
Nadie les grita que ante más de quinientos mil sacerdotes católicos en el mundo, se conocen 200 casos de curas aberrados, esto no quiere decir que sea justificable, pero que si a denuncias vamos, yo como venezolana y como periodista quiero expresar mi espanto porque en mi país, dos rectores de la más antigua e importante Universidad, la Central de Venezuela, militantes acérrimos de esa izquierda, que se cree impoluta, médicos de profesión ambos, resultaron, uno un asesino juzgado y condenado por la muerte de una paciente de 19 años, de la que abusaba sexualmente y a la que asesinó y el otro, ahora está acusado de violar a su hijo, un niño de pocos años…
Dónde entonces están las voces de esa progresía, de esa izquierda estulta que se jura reserva moral e intelectual y nos está mostrando que no son más que reducto de asesinos, aberrados, sádicos y tiranos sanguinarios...
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